El ritual que Megan Fox realiza junto a su novio el rapero Colson Baker, consiste en que ambos beben algunas gotas de la sangre del otro de forma esporádica. Recientemente, se conoció sobre el ritual que causó asombro entre los seguidores dado que uno de ellos se raja el pecho con un cristal y la otra persona bebe su sangre.
La extraña revelación fue hecha en una entrevista con la revista Glamour, un ritual que tienen con su novio, la famosa Megan Fox dijo que «solo son unas pocas gotas, pero sí, consumimos la sangre del otro ocasionalmente, solo con propósitos rituales».
«Están jugando con fuego» al someterse a un controversial ritual en el que beben sangre uno del otro, advirtió un sacerdote exorcista, se trata del sacerdote P. Torres Ruiz de la diócesis de Plasencia y encargado del ministerio del exorcismo, señaló que el ritual que practican «es bastante peligroso» y «en ningún caso es recomendable a ninguna persona, y menos a ningún cristiano».
Megan Fox y su novio, Colson Baker ritual de sangre
«Es usado por una razón, y es controlado, donde es como ‘derramemos unas gotas de sangre y que cada una lo beba»; dijo. Sin embargo, reconoció que su novio «es mucho más desordenado, frenético y caótico», pues «él está dispuesto a abrir su pecho de un corte con un vidrio roto y decir ‘toma mi alma. Déjame sangrar sobre ti'».
La actriz Megan Fox, se describe como alguien “mucho más controlada”, que lee “cartas del tarot y estoy metida en la astrología y estoy haciendo todas estas prácticas metafísicas y meditaciones”.
El P. Torres Ruiz expresó su “estupefacción” por las declaraciones de la famosa actriz, pero precisó que “todo apunta a que ese ritual va a conllevar una invocación al diablo. O si ellos lo consideran fuerzas preternaturales, pero que en definitiva es el diablo”.
Además, indicó, «les puede llevar, pues un tipo de posesión (demoníaca), con lo cual es bastante peligroso lo que están haciendo». El sacerdote recordó que «en la Biblia hay una prohibición expresa de compartir la sangre, de beber la sangre», pero resaltó que «la gravedad de este ritual que ellos practican no está en el hecho solo de beber sangre, sino de compartir un tipo de fluido, de líquido corporal, con una cuestión ritual».
«Es decir, hay una brujería, hay una hechicería en ese acto. Y, por tanto, eso puede conllevar, y de hecho va a conllevar, problemas espirituales, siempre que Dios así lo disponga o lo impida»; dijo.
Por: Colombia.com