Shakira y Piqué llegaron a un acuerdo de separación después de meses de negociar junto a sus representantes legales. Un consenso que tiene como prioridad velar por el bien de los hijos en común y esto incluye la custodia de los menores.
La expareja llegó al Juzgado de Primera Instancia y de Familia Nº 18 de Barcelona por separado acompañados por sus abogados a primera hora de la mañana, y en medio de una gran expectación.
Shakira llevaba unas gafas oscuras y estaba acompañada por su hermano Tonino, su mano derecha, mientras que Piqué también estaba rodeado por sus representantes legales y vestía de sport.
No se les vio juntos en ningún momento por lo que, al menos de manera pública, muestran el abismo que les separa, algo que se ha comprobado además en los partidos de sus hijos en los que también han coincidido (tampoco se les ha visto hablar).
A pesar de la gran cantidad de medios que les esperaban, no hicieron declaraciones ni a su llegada ni al marcharse, cerca de una media hora después, un silencio que han mantenido estos últimos meses durante todo el proceso. Solo quedaría ya que se produzca el mismo trámite ante el juez en Estados Unidos.
Shakira y Piqué dan por concluido su acuerdo de separación
El abogado de Piqué, Ramón Tamborero, comentó a la salida del juzgado que la expareja está más tranquila tras haber finalizado todo el proceso y que Piqué podría instalarse en Miami en el futuro si eso es lo que quiere.
Desmintió además que se hubiera puesto límite a que los niños puedan relacionarse en el futuro con las nuevas parejas de Shakira y Piqué y no aclaró si se habían encontrado dentro del juzgado (las declaraciones del letrado se pueden escuchar en el vídeo que hay sobre estas líneas).
«Queremos comunicar que hemos firmado un acuerdo que garantiza el bienestar de nuestros hijos y que se ratificará en el juzgado, como parte de un trámite meramente formal. Nuestro único objetivo es aportarles la mayor seguridad y protección, y confiamos en que se respete su intimidad.
Agradecemos el interés mostrado y esperamos que los niños puedan continuar con sus vidas con la privacidad necesaria, en un entorno seguro y tranquilo» señaló la expareja tras alcanzar el consenso.
