Los tiempos han cambiado, pero hace más de una década que las cosas en la industria del cine se hacían de un modo muy distinto, algo que incluso violentaba a los propios actores que tenían que verse en situaciones nada agradables para conseguir algunos de los papeles. Durante el proceso de casting, todo era cuestión de química, para probar la conexión de los futuros protagonistas en cámara, especialmente en las comedias románticas.
Anne Hathaway es muy consciente de eso, ya que ha pasado por muchas audiciones hasta convertirse en la estilosa asistente de Meryl Streep en El diablo viste de Prada o en la refinada heredera al trono de Genovia en Princesa por sorpresa. En la época dorada de la cultura pop, en la década de los 2000, la actriz tuvo que enfrentarse a una situación de lo más incómoda que ahora ha recordado en una entrevista con el medio V Magazine mientras promocionaba su nuevo proyecto La idea de tenerte.
La prueba más desagradable de química entre actores la vivió Hathaway y quizás no sea la única intérprete que recuerde estos peculiares y denostados métodos. En aquella época, era algo habitual durante el proceso de casting.
«Hoy vienen 10 chicos y tú ya estás elegida. ¿No estás emocionada por besarlos a todos?’ Y pensé: ‘¿Me pasa algo malo?» Porque no estaba emocionada. Pensé que era asqueroso»; confesó la protagonista de Interestelar. En aquel momento, la actriz estaba en sus inicios y era demasiado joven, por lo que no vio conveniente quejarse. Lo último que quería es ser etiquetada como una «chica complicada».
Anne Hathaway y las audiciones en la época dorada
Anne Hathaway no tuvo más remedio que seguir con el ensayo y fingir que estaba ilusionada. Por suerte, la industria enmienda sus errores pasados. «No fue un juego de poder, nadie estaba tratando de ser horrible o hacerme daño. Simplemente, era una época muy diferente y ahora sabemos hacer las cosas mejor»; manifestó con sinceridad tras aclarar que no sufrió ningún tipo de abuso.
La actriz estrenará el próximo 2 de mayo en Prime Video su nueva película La idea de tenerte, donde interpreta el personaje principal, una madre soltera que vive un romance inesperado con un cantante de una popular boy band. Además, Hathaway asume el rol de productora, lo que le ha permitido participar en el proceso de casting para elegir a su compañero de reparto.
En este caso, la prueba fue muy original y consistía en una improvisación, donde se pidió a los intérpretes seleccionados que escogieran una canción para que la chica bailara. «Yo estaba sentada después de haber ido a cenar o dar un paseo, le dimos al play y empezamos a bailar»; explicó la actriz. Nicholas Galitzine se decantó por un tema de Alabama Shakes. «Saltaron chispas» y fue elegido como coprotagonista de la película.