Johnny Depp perdió su candidatura en la Corte de Apelaciones de Londres para impugnar un veredicto, el año pasado, en un caso de difamación que concluyó que era un ‘golpeador de esposas’, lo que significa que su intento de restaurar su reputación se trasladará a acciones legales estadounidenses.
Un juez desestimó el reclamo por difamación del actor contra el editor del diario The Sun, y descubrió que una columna de abril de 2018, que describía a Depp de la manera antes mencionada era sustancialmente cierta.
“Un juez del Tribunal Superior dictaminó que teníamos razón al calificar a Depp, de 57 años, de ‘golpeador de esposas’ por los brutales ataques a su ex, de 34 años (Amber Heard).”, publicó este 25 de marzo el portal del medio acusado.
Al anunciar el fallo los Tribunales también recalcaron lo siguiente: “Rechazamos la solicitud del Sr. Depp de admitir más pruebas en apoyo de su apelación propuesta y concluimos que la apelación no tiene perspectivas reales de éxito y que no hay otra razón de peso para que se escuche. En consecuencia, denegamos el permiso para apelar“.
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Johnny ya tuvo que pagar $861 mil dólares en honorarios legales después de perder el primer juicio por difamación, y ahora enfrenta el pago de una factura aún mayor por costos y daños después del juicio de hoy.
Además del gasto millonario, Depp también ha perdido sus últimos proyectos cinematográficos que, sin duda, se vieron muy afectados por su disputa legal con Amber y todo parece indicar que esos factores son los que lo mantendrán alejado de las películas.
