Aunque muchos famosos se niegan a reconocer sus cirugías estéticas, no es el caso de Mariana González, la novia de Vicente Fernández Jr.
La empresaria, también conocida como la Kim Kardashian mexicana, a menudo presume los retoques que se ha hecho y anima a otras mujeres a operarse, siempre que el cambio les haga sentirse mejor consigo mismas.
A través de su Instagram organizó una ronda de preguntas y respuestas. Y cuando sus seguidores quisieron saber cuántas cirugías plásticas se había realizado, ella habló sobre el tema y respondió con todos los detalles.
“¿Cuáles son tus operaciones y precio?”, escribió un usuario.
“¿La lista larga o la lista corta? Porque no terminamos”, vaciló ella. En primer lugar, la ex modelo de 38 años explicó sus retoques de cuerpo.
“Tengo lipoescultura, aumento de busto, mis glúteos es grasa no es implante, y me he hecho retoquitos en mi cara también”, comenzó.
“Todo lo que ves es operado“, confesó a sus seguidores
En los últimos meses, se han dado a conocer casos de famosas que sufrieron grandes complicaciones tras colocarse implantes de seno o glúteos.
Sin embargo, cuando le preguntaron a ella si ha tenido problemas con los de ella y aseguró que se siente cómoda y nunca le molestan.
“Ahorita los implantes están tan tan naturales, lo haría y te lo mostraría para que vieras que se siente y se ve muy natural. Ahorita ha avanzado todo, no creas que es así como una roca, se siente así como si fuera tuyo”, aseguró.
El rostro de la empresaria
Además, la futura esposa de Vicente Fernández Jr. destapó los retoques que se ha hecho en el rostro y confesó que se operó por primera vez a los 20 años.
“Te voy a explicar, yo tengo la bichectomía. Tengo lipo de papada. Tengo relleno de labio, pero es relleno. También te rellenan para marcarte un poquito esto (la parte de la mandíbula). Mi nariz no, eso sí es natural. Me hice hace años para que se me hiciera el ojo más jaladito”, agregó.
Según cuenta, su intención al revelar sus cirugías, las clínicas a las que ha ido, y los profesionales en los que confía, es ayudar a otras mujeres a que se sientan bellas, e impedir que caigan en manos de estafadores.
Para ella, es necesario eliminar el tabú que existe en este sentido, y no importa si vas demasiado “tuneado” o “producido”, sino que te sientas bien contigo mismo.