Justo cuando se cumple una semana del fallecimiento del veterano periodista Larry King del que todos los medios confirmaron su muerte por culpa del coronavirus, la que fue su esposa, Shawn King, ha sorprendido con unas declaraciones que niegan rotundamente que esa fuera la causa.
Si bien es cierto que inicialmente fue ingresado en el hospital Cedars Sinai de Los Ángeles por su contagio de la COVID-19, después de un mes bajo cuidados médicos, el conductor de la CNN logró ganarle la batalla al virus.
Según Shawn explicó en una entrevista a Entertainment tonight, Larry "superó" la enfermedad. Sin embargo, su cuerpo había quedado muy debilitado, el virus "le quitó energía" y eso le condujo a su muerte.
"Una infección no relacionada fue la que se lo llevó", dijo refiriéndose a la sepsis, una condición que se da después de una infección bacteriana. "Al final no fue la COVID-19. Su cuerpo había sido golpeado tantas veces con tantas cosas que una vez que escuchamos la palabra COVID-19 nuestros corazones quedaron destrozados, Lo superó pero pasó factura", explicó su viuda desolada en su primera entrevista tras la partida de Larry.
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Finalmente el virus se fue pero dejó demasiados daños en el organismo del prestigioso comunicador que no pudo superar. Shawn, quien estuvo casada con él los últimos 20 años hasta que en 2019 decidieron separarse, también compartió sus últimas palabras con él.
"Te amo, cuida de los chicos", le dijo a través de una llamada por FaceTime. La pareja no llegó a divorciarse nunca y siempre mantuvo una buena relación. "Larry y yo nunca finalizamos nuestro divorcio. En mi corazón, no pensé que realmente fuera a suceder y nunca sucedió. Éramos socios en todos los sentidos, primero en nuestra familia y luego en los negocios", concluyó.
