Cuando marcó el mediodía de este lunes en España, el cantante Joaquín Sabina se convertía legalmente en el esposo de Jimena Coronado, quien ha sido pareja por los pasados 25 años.
La boda se realizó en el registro civil de la calle Pradillo de Madrid y fue oficiada por la secretaria del juzgado, según reporta el diario El País.
Fue un casamiento discreto, al que los contrayentes acudieron en vestimenta casual, de tono azul marino, y llevando las debidas mascarillas. Asistieron como testigos el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien es amigo de la pareja, y el cantante Joan Manuel Serrat, otro inseparable de Sabina.
Los recién casados fueron vistos al salir por la llamada “puerta de bodas”, por donde suelen salir quienes recién contraen matrimonio.
Serrat comprometió a su compañera en noviembre pasado, durante la celebración de los 50 años de ella, quien es natural de Perú.
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El artista, de 71 años, se arrodilló y ante el grupo de invitados, le entregó un anillo y le recitó un poema.
La relación tuvo su génesis en el 1999, cuando ella acudió a una suite de un hotel en Lima, Perú, como fotógrafa del diario El Comercio para realizarle un reportaje. Luego quedaron para verse en bar, meses después hicieron lo propio en México y hace cerca de 20 años que llevan una convivencia en Madrid.
Ella es quien maneja la agenda artística del cantautor, para quien este es el segundo matrimonio.
