La mayoría de celebridades prefieren pasar sus días de descanso en lugares que les proporcionen cuanta más intimidad mejor, rodeados de tantas medidas de seguridad como resulte posible para esquivar a los paparazzi, pero Demi Lovato y su novio no tuvieron ninguna problema en pasar la noche en un edificio con muros de cristal el pasado fin de semana.
La cantante organizó un viaje al Parque Nacional Joshua Tree, en California, junto a su novio Max Ehrich y eligió como alojamiento la popular mansión conocida como The Invisible House, que ofrece una panorámica incomparable del desierto californiano gracias al material con que está construido: cristal.
Desde el exterior, el edificio refleja su entorno como si estuviera hecho de espejo, para proteger a sus huéspedes de miradas indiscretas, pero en el interior da la impresión de que todas las paredes son ventanas.
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La vivienda de cuatro habitaciones cuenta además con puertas deslizantes que se abren a la zona de la alberca y a la sala de cine al aire libre.
Desde luego, por las fotos que compartió en su Instagram, Demi disfrutó de una experiencia inolvidable junto a su chico, que le costó dos mil 500 dólares por noche.
Según la cantante, pasó “un fin de semana increíble en el desierto mágico” con Max, además de que explicó que no se trató de una escapada romántica, sino que eligió este spot para un proyecto del que hablará más adelante.
