Aunque pareciera que la relación entre Kim Kardashian y Kanye West es una de las más sólidas del medio, no es así. La pareja está pasando por un momento complicado debido a los cuatro hijos que tienen en común; North, Saint, Chicago y Psalm, quien nació en mayo de este año.
Fuentes cercanas a la familia West Kardashian revelaron a la revista australiana NW que el rapero entró en conflicto respecto a sus dos hijos menores, quienes nacieron a través de un vientre subrogado, por lo que según las creencias del músico, va “en contra la voluntad de Dios”.
Por otro lado, la misma fuente asegura que Kim lleva tiempo lidiando con las nuevas creencias religiosas de Kanye y que el empresario no siente un vínculo fuerte con sus dos hijos menores por la forma en la que nacieron.
“Él cree que las mamás reales de los niños son las que los dieron a luz, lo que dejó a Kim inconsolable. Esto está destruyendo su familia, Kim ha aguantando muchísimo a Kanye a través de los años, pero una vez que se mete con el futuro de los hijos, ella no está dispuesta a aceptarlo”, declaró la fuente a NW.
Estas declaraciones se contrastan con las que el mismo Kanye dio a finales de octubre durante su participación en The Late Late Show, en la que reveló a James Corden que le gustaría tener siete hijos.
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"Yo quiero tener siete hijos: la mayor riqueza que puedes tener en este mundo son muchos hijos", ha asegurado Kanye, que ha prometido que en esta ocasión ha hablado con Kim antes de soltar esa bomba.
"No me gusta salir de noche, prefiero quedarme en casa con mi familia tan a menudo como pueda. Solemos cenar todos juntos y después jugamos con los niños.
Luego los acostamos y nos vamos a la cama. Y mi esposa suele ver 'Dateline' mientras yo leo la biblia”, declaró Kanye.
Kim decidió recurrir a una gestación subrogada para tener a su tercer y cuarto hijo, debido a que mientras estaba embarazada de North, Kim sufrió preeclampsia, una complicación que se caracteriza por hipertensión arterial, además de que padece una dificultad conocida como placenta retenida, lo cual pondría en peligro la vida de la socialité y de su bebé.
