El pasado fin de semana Jennifer López y Alex Rodríguez se dieron una escapada romántica a las paradisíacas playas de Las Bahamas.
Además de disfrutar de un momento solos, el exbeisbolista aprovechó la oportunidad para pedirle matrimonio a la cantante con un enorme anillo de US$5 millones.
La pareja notó la presencia de los paparazzi pero pareció no importarles y se dejaron ver muy románticos.
Sin embargo, lo que más llamó la atención es que la también empresaria demostró que a sus 49 años sigue siendo dueña de uno de los cuerpos más envidiables en el mundo.
Ella fue captada luciendo un bikini azul dejaba ver sus curvas, y pudimos ver cómo luce su figura sin ningún filtro.
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Después de la adrenalina por el compromiso y de disfrutar de unos maravillosos días de asueto en el Caribe, la pareja ha retomado su agenda en Miami, Florida.
THAT BODY!? Jennifer Lopez & Alex Rodriguez in Bahamas.?? pic.twitter.com/PnAvt148t5
— Best of Jennifer Lopez (@JLo_Philippines) March 13, 2019
Ellos residen ahí con los mellizos que la actriz tuvo fruto de su matrimonio con Marc Anthony y en donde anoche celebraron en familia este importante acontecimiento.
JLo está encantada con su alianza, tanto que no tiene ningún problema en lucirla incluso cuando va al gimnasio.
Con unos leggings ajustados con detalles semitransparentes en los laterales y una camiseta 'cropped', la neoyorquina fue vista este miércoles por la tarde abandonando su centro deportivo mientras presumía de la joya.
"Vuelta a la rutina", escribía esa misma mañana el empresario en una de sus historias de Instagram, mientras aparecía conduciendo su propio coche.
En medio del compromiso matrimonial, así vacacionan @jlo y @arod en Bahamas ?#Repost @TuManana13 pic.twitter.com/E26QFVth7j
— Telemetro (@Telemetro) March 13, 2019
Rodríguez ha logrado crear todo un imperio empresarial, donde dirige múltiples negocios. El que más beneficios le genera es la corporación A-Rod Corp, donde se dedica a invertir en diferentes proyectos para más tarde duplicar su valor en el mercado.
Un proyecto del que se siente especialmente orgulloso y con el que estos días batía un nuevo récord al conseguir que una propiedad tasada en un primer momento en 13,5 millones de dólares, casi 12 millones de euros, se revalorizase en más de 22,3 millones (cerca de 20 millones de euros).
