Tachan de hipócrita al hombre que pidió matrimonio a su novia en los Emmy

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Las redes sociales se encargan, en mayor parte de las ocasiones, de entretenernos destacando los momentos más virales. En los Emmy 2018, el momento fue la petición de mano de Glenn Weiss a su pareja, sentaba en el patio de butacas, en pleno discurso de agradecimiento.

Este director cinematográfico comenzó dando las gracias, como de costumbre, a su familia y amigos. Pero el gran momento llegó cuando se refirió a su pareja: «Gracias a mi novia, pero es que quiero dejar de llamarte mi novia para llamarte mi mujer». Sí, Weiss aprovechó la ocasión para pedirle matrimonio a su novia, que estaba sentada en las butacas.

 

La cara de y la de todo el Teatro Microsoft fue de sorpresa y alegría. «Creo que me voy a alargar un poco», comentó Weiss; sin embargo, nadie se atrevió a interrumpirle. Su pareja subió hasta al escenario, mientras el director le advertía que aún no se lo había pedido. «Este es el anillo que mi padre le dio a mi madre hace ya 67 años». Eso sí, el director también tuvo una mención para sus hermanos. «A mis hermanas y mis hermanos les tengo que decir que no se lo mangado a papá. Él sabe que lo tengo yo».

Ni ensayado y con un guion les habría salido tan bien la jugada. Eso sí, ahora hay gente que asegura que no le parece bien lo ocurrido. Y no son los típicos tuiteros los que se han quejado, han sido profesionales del mundo del espectáculo que han trabajado con Glenn Weiss, a quien ahora tachan de hipócrita.

El director fue el encargado de dirigir durante muchos años la gala de los premios Tony, los más prestigiosos del mundo del teatro . En la ceremonia, también retransmitida por televisión, los premiados cuentan con un tiempo establecido para dar su discurso de agradecimiento y si se exceden, se corta el micrófono y se sube la música. Sin miramientos, destaca ABC

Justo esa norma era la que más preocupaba a Glenn Weiss cuando dirigía la gala. «Todos los años Glenn daba un discurso muy pomposo a los nominados y les avisaba en plan regañina que el tiempo empezaba a contar desde el momento que escuchaban su nombre», afirma uno de los trabajadores que trabajaron con él en «PageSix».

«Decía que pasarse de tiempo era una falta de respeto porque reducía los 45 segundos establecidos a muchos menos para el resto de las categorías. Entenderán cómo nos hemos quedado todos cuando le hemos visto saltarse así sus propias normas solo para acaparar toda la atención sobre él y sobre su novia», explican. Sí, Weiss utilizó más tiempo del debido (unos tres minutos) y nadie le cortó el micrófono ni le subió la música.