La modelo y diseñadora británica ha optado por el azul marino oscuro para asistir a la mediática cita.
Entre las más altas personalidades que han acudido este sábado a la mediática e histórica boda de Meghan Markle y el príncipe Harry se encuentra la pareja Beckham. El futbolista y la diseñadora de moda británicos han sido de los primeros invitados en llegar a la Capilla San Jorge, que daba acceso a su interior por orden de importancia.
Minutos antes del matrimonio en Reino Unido, los Beckham sorprendieron con su llegada a más de uno y demostraron la estrecha relación que existe con la familia real británica.
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Para la ocasión, Victoria Beckham ha optado por un traje azul marino oscuro por debajo de las rodillas. El vestido luce unas hombreras y unas largas mangas con oberturas laterales, además de un cuello chino cerrado con una hebilla plateada.
Aunque el punto de color lo ha puesto en los zapatos, unos stilettos de color rojo, la ex miembro de las Spice Girls no ha acabado de acertar con su estilismo, demasiado serio y apagado para una boda de día.
El tocado, del mismo tono oscuro, cuenta con un pequeño gorro de estilo boina y un acabado con rejilla que otorga elegancia a la pieza.
Su acompañante, su marido David Beckham, tampoco ha dado en el clavo en esta ocasión. El futbolista estrella del Manchester ha optado por el esmoquin para esta celebración real, una opción algo desmedida para una boda diurna. El formal traje lo ha combinado con unas gafas de sol.
David Beckham recibió elogios por su traje, pero la que se ganó las críticas fue Victoria Beckham debido a que con su vestido oscuro y un recatado escote, la ex Spice Girls dejó notar que no llevaba sostén.
No todo quedó allí. Además de dejar notar sus pezones, los cibernautas arremetieron contra la esposa de David Beckham lució muy seria. Incluso algunos aseguran que hasta parece molesta e incómoda.