El enfrentamiento entre Sarah Jessica Parker y su antigua compañera de reparto Kim Cattrall ha acaparado titulares en los últimos meses mientras miles de fans contenían la respiración para saber si la segunda accedería a grabar esa secuela con la que llevaban años soñando.
Finalmente la actriz encargada de dar vida al popular personaje de Samantha dejó claro que no estaría dispuesta a retomar ese papel bajo ninguna circunstancia, al mismo tiempo que denunciaba el ambiente tóxico que habría rodeado a la popular serie de la HBO y señalaba como la gran culpable de esa situación a la protagonista.
Por su parte, la estrella indiscutible de 'Sexo en Nueva York' contraatacó dando a entender que 'las exigencias de diva' de Cattrall habían acabado con lo que podía haber sido una gran película y en esa misma línea acaba de volver a pronunciarse.
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Con la excusa de dar carpetazo a su enemistad con la intérprete con quien colaboró durante más de una década, Sarah Jessica ha vuelto a insinuar muy sutilmente que la 'cuarta en discordia' es Kim y que si entre el resto de las estrellas del reparto -Kristin Davis y Cynthia Nixon- y ella nunca ha existido ningún tipo de tensión, por algo será…
"Me gustaría recordarle a todo el mundo que esto no es ninguna pelea de gatas. Yo no he pronunciado o le he dirigido ni una sola palabra poco amable o cortés, así que si se me permite quiero redefinir la situación. También quiero mencionar que había cuatro mujeres en el set de rodaje y pasé la misma cantidad de tiempo con cada una de ellas: no se trata solo de dos personas que no se llevaban bien. Siempre he tenido en alta estima el trabajo de Kim y siempre he apreciado sus contribuciones.
Si ella ha elegido no hacer la tercera película, no hay mucho que yo pueda hacer para conseguir que cambie de opinión, y debemos respetar eso. Eso es lo único que yo he dicho", asegura la intérprete en declaraciones a 'Vulture'.
Cierto es que, a lo largo de todo este problema, Sarah Jessica ha sabido mantener la compostura en todo momento, al contrario que Kim, quien no dudó en tildarla de hipócrita públicamente cuando la primera le hizo llegar a través de las redes sociales su más sentido pésame tras el fallecimiento de su hermano.
Por otra parte, también es justo admitir que las declaraciones de la inolvidable Carrie Bradshaw en las que aseguraba que su antigua compañera había echado por tierra el rodaje de la tercera entrega semanas antes de que arrancara, expresando además su decepción ante el hecho de que los seguidores de la historia no fueran a disfrutar del "maravilloso" final que habían escrito para las cuatro amigas neoyorquinas, era más que suficiente para colocar a esta en una situación muy incómoda, al convertirla en persona nongrata para miles de seguidores de 'Sexo en Nueva York'.
Los fans de la ficción televisiva son lo que Sarah Jessica tiene en mente en todo momento y por esa misma razón lamenta que las declaraciones de Kim Cattrall rompieran la magia que rodeaba a una serie basada principalmente en la amistad y la solidaridad entre mujeres.
"Estamos muy orgullosas de lo que hicimos juntas. Pasamos diez o doce años de nuestras vidas haciendo algo que yo adoraba y me siento una privilegiada por haber formado parte de un proyecto similar y no quiero que el hecho de que alguien comparta su opinión públicamente -y Kim está en su derecho de hacerlo, así son las cosas-, pero no quiero que eso eclipse todo lo que hicimos o que cambie la experiencia del público, que siempre se ha portado tan bien con nosotros".
