Después de muchos meses de batallas, rumores y conflictos entre los actores Julián Gil y Marjorie de Sousa por fin realizarán la prueba de ADN a su pequeño Matías.
A casi un año de que comenzó la polémica por toda la situación legal y amorosa de la pareja, la polémica se desató cuando el 14 de febrero del 2017, Alberto Gómez, publicista de la actriz dijo al programa Un Nuevo Día que ambos se habían separado y tenían poca comunicación.
La incertidumbre aumentó cuando Julián Gil eliminó todas las fotos de su Instagram, donde aparecía con Marjorie aunque por medio de las redes sociales informaban que todo iba bien en el embarazo y que hasta había planes de boda.
Después de que su publicista diera a conocer la información de la ruptura, Marjorie de Sousa también emitió un comunicado donde confirmó los rumores. Entonces, dijo que "desde lo más profundo de mi corazón estoy agradecida siempre por su apoyo, no les niego que es un momento muy muy difícil, pero les pido para mí y mi familia respeto y prudencia, han sido meses de enfrentarme muchas decepciones y realidades que no imaginé, es muy complejo lo que vivo como mujer, como madre y como ser humano en todos los sentidos de mi vida".
Por otro lado, Julián Gil ha llorado al recordar a su mujer y a niño. Fue en Miami donde evocó a su familia, "los hombres padecemos, sentimos y también sufrimos… yo también estoy decepcionado, también estoy triste, también estoy frustrado, le aposté a una relación con ilusión".
Después, entre todo el proceso legal y las discusiones por la custodia del niño, la pensión provicional decretada, y la prueba de ADN que el actor le pedía a pesar de las negaciones de Marjorie, hoy por fin la actriz llevó a Matías para comprobar si realmente es su hijo.
TvyNotas transmitió en vivo, la llegada de Marjorie al laboratorio, junto con su hijo Matías y su abogado. En el lugar esperaban un sin fin de medios, quienes dificultaban el paso de la actriz hacia el lugar.
“A ver jóvenes por favor dejen pasar, viene con un bebé. A la salida platicamos”, se escucha en la grabación.
Marjorie lucía tranquila y respondía sonriente a las preguntas más sencillas que le hacían los reporteros:
– ¿Qué le trajo Santa Claus?, le preguntan.
– ¿Santa Claus?, un carro, responde ella y se rie.
En el lugar guardias resguardaban la puerta, para impedir el acceso de la prensa que se amontonaba por ver un poco más lo que sucedía dentro.
Algunos usuarios en Facebook que miraban la transmisión, comentaron que ese proceso debió haber sido en privado entre la pareja.