La cantante vuelve a su país natal para acudir a la inauguración de una calle con su nombre, y lo hace con un look a la altura. Rihanna escoge el amarillo para celebrar que ya tiene una calle con su nombre: bienvenidos a Rihanna Drive.
¿Imaginas poder vivir en la calle Rihanna? ¿Ir en coche y decir “no, mejor giro aquí, en la calle Rihanna, llegaremos antes”? Pues ahora los habitantes de Barbados pueden hacerlo. El país caribeño que vio nacer a la estrella tiene ahora su propia Rihanna Drive, y la cantante ha ido personalmente a celebrar la inauguración de la calle.
Acompañada por sus padres, Rihanna acudió al significativo evento vistiendo uno de sus colores más icónicos (recordemos aquella capa de Guo Pei de la MET gala, que pasará a formar parte de una exposición museística), el amarillo ligeramente mostaza que ha venido a conocerse como Gen-Z yellow.
La silueta fue también una de sus favoritas, las camisas fantasía de mil posibilidades. Mangas extra largas y escote off-the-shoulders, y cintura anudada con un trampantojo de mangas. La apuesta por el amarillo Gen-Z fue tan rotunda que Rihanna jugó al total look con zapatos y mini-bolso, y también en la sombra de ojos dorada. Sólo el paraguas negro rompía la lluvia dorada. No es extraño que la cantante escogiese el amarillo, dado que es uno de los colores que identifica a la bandera de Barbados. Era el look que la ocasión merecía.
Es un día importantísimo para Rihanna. No es que ella necesite esa excusa para sorprender con sus looks, porque nos deja flipando en la red carpet o cuando sale a comprar el pan. Pero no todas las mañanas una viaja a Barbados para inaugurar una calle con su nombre. Welcome to Rihanna Drive, quiso decirnos a todos RiRi con ese look amarillo de pies a cabeza que se veía desde el espacio.
No es la primera vez que rinden homenaje a la cantante. Ya ha ganado premios por su labor humanitaria en el pasado, pero una calle con tu nombre siempre es algo que celebrar. Para ello Rihanna se ha convertido en un rayo de sol que desafió a las lluvias torrenciales de su ciudad natal, con un vestido destructurado de Hellesy con mangas de campana.
Este es uno de los colores que mejor sientan a Rihanna, ya lo sabemos. Pero si encima lo combina con gargantillas de Oscar Heyman y unos tacones combinados con pulseras tobilleras nos tenemos que quitar el sombrero. Los looks de street style de RiRi se han convertido ya en toda una atracción y nunca defraudan.