Conocida como "la Princesa del Pueblo", pocas figuras públicas siguen siendo tan queridas y enigmáticas como Diana, Princesa de Gales. Desde el momento en el que la tímida maestra jardinera, con su encanto natural, llamó la atención del heredero al trono real, nació un ícono moderno.
A pesar de su angustiosa vida amorosa, su matrimonio con el hombre que había conocido a sus 17 años y era trece mayor que ella, la presión de ser todo el tiempo lo que la prensa buscaba y la tormentosa relación con la familia real británica, a Lady Di le alcanzaron sólo dieciséis años para ganarse el corazón del pueblo. El día de su muerte -hace ya 20 años- el mundo se estremeció: era joven, hermosa, carismática y solidaria.
"Es decir, tuve una infancia muy infeliz. Sólo recuerdo estar muy distante de todos los demás. Un minuto no era nadie y al minuto siguiente era la Princesa de Gales, madre, juguete de los medios, miembro de esta familia, lo que pueda imaginar. Fue simplemente demasiado para una persona, en ese momento", relata Diana Spencer a cámara en una de las tantas grabaciones inéditas que dará a conocer National Geographic esta noche en el documental Diana en primera persona.
Se trata de una novedosa recopilación de una serie de entrevistas secretas grabadas en 1991 dentro del palacio de Kensington en Londres para el periodista Andrew Morton, quien escribía un libro sobre la vida de "la mujer más fotografiada del mundo". En ese momento, el público ignoraba que el matrimonio de Diana con el príncipe Carlos estaba en crisis.
Su casamiento el 29 de julio de 1981 estuvo envuelto en rumores -como casi toda su vida- y marcó el inicio del fin de una pareja que nunca pudo ser. Carlos vivía obsesionado por Camila Shand, su segunda esposa, y Diana prefirió pasar su tiempo dedicada a la filantropía. Las fotos de la pareja feliz, disfrutando con sus hijos -Harry y William, hoy príncipe y duque de Gales respectivamente- eran una farsa.
"De alguna manera él estaba obsesionado conmigo pero era caliente, frío, caliente, frío. Nunca sabías de qué humor iba a estar", relata Diana en las grabaciones. Era evidente que su relación era distante, superficial y asfixiante, aunque ella confiesa haber estado locamente enamorada de él.
Desde el momento que Carlos le propuso casamiento para Diana todo fue "ridículo". "Subí las escaleras, almorcé con mis hermanas y dije 'no puedo casarme con él. Esto es absolutamente increíble' y ellas me contestaron 'mala suerte, tu cara está en el paño de la cocina, ya es tarde para acobardarte'", relata con voz triste. Incluso el fantasma de Camila el día del casamiento fue demasiado para ella.
Otra de las revelaciones del documental es la confirmación de su bulimia.
La princesa describe cómo se sintió "encogida hasta la nada" en los meses previos a su boda, en julio de 1981. "La bulimia comenzó una semana antes del compromiso. Mi marido puso una mano en mi cintura y dijo: 'Un poco gordita por aquí, ¿verdad?'. Eso disparó algo en mí", relata Diana.
Y los detalles: "La primera vez que me midieron para el vestido nupcial, tenía 73 centímetros de cintura. El día que me casé, medía 60 centímetros".
Diana en primera persona combina archivo audiovisual y fotografías con grabaciones raras veces escuchadas y es la entrega más reciente del sello de National Geographic Documentary Films. Producida ejecutivamente por el aclamado realizador ganador de un premio Peabody Tom Jennings, el nuevo documental brinda una perspectiva novedosa del viaje emocional de la princesa desde su infancia, la relación con sus padres, su vida pública, sus primeros encuentros con el príncipe de Gales, el impacto de la exposición y sus consecuencias.
Con detalles vívidos, la princesa Diana reflexiona sobre la historia de su vida, relatando sus circunstancias por entonces. Con franqueza, lleva a los espectadores desde su desdichada infancia hasta su incómodo ingreso en la vida monárquica. Perseguida por la prensa y adorada por una nación cautivada por un romance de cuento de hadas, Diana sabía que no estaba preparada en absoluto para la fama que la envolvió. Esta es una de las primeras veces donde se puede conocer su versión, la historia contada en su voz.
El documental –que se estrena esta noche a las 22 horas por National Geographic– capta un quiebre entre la imagen pública y privada de la princesa, subrayando las intensas y muchas veces retorcidas descripciones de sus pensamientos y sentimientos en 1991.
Resueltamente cuenta el emotivo día de su casamiento y sus experiencias de depresión postparto, bulimia y triunfo eventual sobre su ansiedad paralizante, para convertirse en una humanitaria a nivel internacional: la icónica y tan querida Princesa del Pueblo.
"Desglosamos los momentos más importantes de su vida y los ordenamos cronológicamente, luego los ilustramos con informes de la prensa e imágenes de archivo de la época", indicó Tom Jennings, productor ejecutivo. "A lo largo del documental, se escucha el proceso mental de la Princesa Diana en una época en la que todos creían que estaba viviendo un cuento de hadas. Pero en realidad, su matrimonio y su vida estaban desmoronándose".
El libro de National Geographic, Remembering Diana: A Life in Photographs, también estará disponible a partir del 1 de agosto en Estados Unidos con un prólogo especial escrito por Tina Brown, amiga, confidente y exitosa biógrafa de la princesa Diana, cuyo libro The Diana Chronicles encabezó la lista de superventas del New York Times.