Había muchos rumores de dónde se casarían el astro mundial Lionel Messi y Antonela Roccuzzo. Lo que siempre estuvo claro es que la sede sería en Rosario.
Para ambas familias, la ceremonia religiosa era algo importante, por lo que en una primera instancia optaron por sellar su enlace ante Dios en la Catedral de esa ciudad. Este edificio histórico fue nombrado Santuario en 1998, momento hasta el cual era considerado como una basílica menor.
Sin embargo desistieron de la elección por cuestiones de seguridad, debido a la pasión que despierta el astro en miles de fanáticos.
Otro de los escenarios posibles –de perfil más bajo– fue celebrarlo en la Parroquia Nuestra Señora de las Nieves, en el barrio La Bajada, donde crecieron ambos.
Finalmente, se pensó en un plan C: solicitar una capilla improvisada en el Complejo del Casino City Center, donde esta tarde a las 19 un juez local los casará por Civil.
Sin embargo, no fue autorizado por el Arzobispado de Rosario. "La jerarquía está muy reacia a autorizar ceremonias fuera de las parroquias, iglesias, templos, capillas y otro ámbito religioso, sobre todo en un sacramento como el del matrimonio", revelaron desde la entidad.
A su vez, comentaron que "no autorizan ceremonias fuera de ámbitos religiosos por cuestiones sacramentales"; esto se logra en casos especiales a través de una dispensa canónica, algo que no sucedió en este caso.
En esa misma línea, los novios está domiciliados en Barcelona por lo que deberían recibir el permiso desde España por una cuestión de jurisdicción.
El escenario elegido también influyó en la decisión debido a la resistencia de la Iglesia al juego y al casino, por lo que finalmente sólo habrá una 'sencilla' unión civil, según el director del Registro Civil, Gustavo Carillo.