Luego de más de dos años de litigio, Katy Perry ha logrado un fallo a su favor que le da el derecho de adquirir un convento para convertirlo en su residencia.
De acuerdo con The Hollywood Reporter, Stephanie Bowick, jueza de la corte superior de Los Angeles, le dio la razón a la cantante en la batalla legal que mantenía con Rita Callahan y Catherine Rose Holzman, representantes de la Congregación Misioneras Corazón de María.
Las representantes de la congregación religiosa se negaban a la venta de la propiedad, ubicada en Los Feliz, California, a la cantante, pese a que ella había demostrado tener la capacidad de pago para adquirirlo. Por el contrario, las monjas –que además no tenían facultades para vender el inmueble perteneciente a la Iglesia católica estadounidense- querían otorgarlo a una tercera persona que no contaba con solvencia y que quería convertirlo en un hotel.
Aunque en abril de 2016 la jueza ya había determinado que las hermanas no tenían autoridad legal para vender el convento a la empresaria Dana Hollister -quien ofreció únicamente $44 mil dólares y documentación sin garantía de que haría el pago completo- ellas lo impugnaron, por ello este nuevo dictamen, deja en claro que aunque las monjas hubiesen tenido la capacidad legal para venderlo, la compradora no cumplió con su parte del acuerdo al no pagar el dinero adeudado.
En contraparte, Katy Perry ofreció 14.5 millones de dólares a la arquidiócesis, con el fin de convertirlo en su casa.
Se dice que las monjas siguen inconformes con la venta a la cantante, a quien también acusaron de hechicería tras haber participado del tour de “Las brujas de Salem” en el estado de Massachusetts la semana pasada.