Las pieles regresaron a la pasarela parisina y Stella McCartney reivindicó el lunes que fueran sintéticas, en una jornada de desfiles en la que predominó el tartán en las colecciones de Rihanna y el colombiano Esteban Cortázar.
La hija de Paul McCartney, defensora de los animales y vegetariana, presentó una colección inspirada en el universo ecuestre, evocando la campiña inglesa, informa Telemetro.
Stella McCartney, que fundó su firma en 2001, estimó que las pieles sintéticas ahora "lucen tan bien" que uno se pregunta "por qué es necesario seguir utilizando" las de animales.
No dudó en llamar sus creaciones "piel libre de piel".
En su próxima colección otoño-invierno, dominan los grises y los estampados a cuadros pequeños, resultando en un estilo sobrio y elegante.
Destaca además "una nueva encarnación del sujetador puntiagudo", que remite irremediablemente al famoso corsé de Jean Paul Gaultier y a su modelo más famosa, Madonna, aunque en versión comedida.
El desfile de McCartney estuvo en sintonía con la acción que protagonizó frente a la Torre Eiffel la organización defensora de los animales PETA contra el uso de pieles en la Semana de la Moda de París.
Varias militantes posaron con ropa interior, máscaras de animales y pancartas que proclamaban "no soy tu lana", "no soy tu cuero" y "no soy tu piel".
La cantante Rihanna presentó fuera del programa oficial su nueva colección de Fenty Puma, dominada por el tartán, las prendas asimétricas y el estilo deportivo.
Sobre mesas de biblioteca con lámparas verdes, al más puro estilo universitario, los modelos masculinos y femeninos lucieron prendas de cuadros, abrigos voluminosos y suéters con capucha.
Un minivestido presenta una especie de liguero atado a las botas negras forradas con una tela de tartán.
Los amarillos y los naranjas se combinan con el azul marino en los looks más deportivos, con grandes inscripciones que rezan Puma, Fenty, o la fecha 1988, año de nacimiento de la cantante.
Al desfile asistieron la actriz Salma Hayek y su esposo François-Henri Pinault, propietario del grupo de lujo Kering.
El único latinoamericano del programa oficial de la Semana de la Moda de París, el colombiano Esteban Cortázar, eligió uno de los liceos de más renombre de París, el Henry VI, para lanzar una colección nutrida de tartán y alegría cromática.
Un tartán que declina el azul y puntuado con rayas rojas monopoliza la silueta, desde la chaqueta, hasta la falda, las medias y los zapatos.
El famoso estampado a cuadros se combina con motivos floreados, en prendas de cortes inesperados en las que coexisten tejidos de naturaleza diversa, un caos que pese a todo transmite coherencia.
Las prendas de telas brillantes, las botas por encima de la rodilla y las camisetas de tirantes que marcan el pecho marcan el look más sensual de la colección de este colombiano, que se crió en Miami y debutó en la Semana de la Moda de Nueva York a los 17 años.
"Quería desbloquear la percepción que se tiene de Hermès, como si fuera estirado y serio, y mostrar algo más vibrante. Por eso utilicé prendas inesperadas como los guantes o los estampados de cachemira", admitió la directora artística de la firma, Nadege Vanhee-Cybulski.
Con el fin de presentar un "cuadro impresionista", la diseñadora presentó una colección de tonos beiges salpicados de motivos rojos, faldas tubo, cinturones anchos y botas altas de piel con cordones.