Pese a la expectación que había generado en las últimas semanas el posible regreso de Kim Kardashian a la Semana de la Moda de París, parece que el traumático atraco del que fue víctima el pasado octubre en la capital francesa sigue demasiado fresco en su memoria.
La delebridad ha tomando la decisión de no viajar a la ciudad, la noticia ha sido como una de las más destacada por el medio de comunicación Telemetro.com
"No creo que vaya a la Semana de la Moda de París. Pero se encuentra mucho mejor", confesó su mejor amigo Jonathan Cheban en el programa de televisión 'Lorraine' cuando se le preguntó por su influyente amiga.
La ausencia de Kim en la exclusiva cita será la primera en varios años, en concreto desde que actualizara su imagen y diera el salto a la Alta Costura al mismo tiempo que comenzaba su relación sentimental con Kanye West, rapero y diseñador.
Además de acudir a los desfiles de su hermana pequeña, la modelo Kendall Jenner, siempre que le era posible, la popular estrella televisiva también es musa de diseñadores como Riccardo Tisci (antiguo director creativo de Givenchy) y Olivier Rousteing (Balmain), por lo que los desfiles de ambos solían ser algunos de los más mediáticos en gran parte por la presencia de la más famosa del clan Kardashian en primera fila.
Pero parece que las secuelas psicológicas del dramático atraco que vivió la celebridad han pesado más que su pasión por la moda, por lo que ha decidido quedarse, al menos por ahora, en Estados Unidos.
Su decisión podría estar en parte relacionada con el hecho de que, pese a que la policía francesa ha detenido a varias personas en relación con el robo aún no se han encontrado ninguna de las exclusivas joyas que le fueron sustraídas.
Según se relevó recientemente, el contenido del botín con el que se hicieron los ladrones tras maniatar a Kim y encerrarla en el baño de su exclusivo apartamento ascendía a entre 8,5 y 10 millones de dólares.
Entre las piezas se encontraban dos brazaletes de diamantes de Cartier, un collar de oro con diamantes, pendientes también de diamantes, un anillo adornado con esas mismas piedras preciosas y un collar de Loraine Schwarz, entre otros.
