Sobran los temas, parajes y espacios para retratar la belleza de Nicaragua, pero da gusto ver que los extranjeros promuevan la riqueza arquitectónica, los paisajes majestuosos, nuestros imponentes volcanes y sobre todo nuestra gente.
El director de cine Destyn Patera realizó un recorrido por Nicaragua y Honduras para vacacionar, pero también filmar la belleza de nuestra tierra de lagos y volcanes, buscar su inspiración y crear sin necesidad de una locución descriptiva, una bellísima película que muestre en esencia lo lindo que es nuestro país.
Aparentemente el creador se hizo valer de su cámara, equipos de buceo y drones para realizar las grabaciones. Las locaciones sin duda alguna son lugares ya conocidos pero que al grabarlo en ciertas condiciones y con una buena musicalización dan como resultado una pieza digna de ponernos la piel de gallina.
Su figura principal es una joven mujer que viaja en un bus y visita diferentes parajes. Una de las primera imágenes rápidamente reconocibles es el volcán Concepción en la isla de Ometepe, luego la catedral de León, patrimonio histórico de la humanidad declarado por la UNESCO. El director explotó también en gran parte la arquitectura y cotidianidad que le daba La Gran Sultana, Granada, sus calles, la gente.
Algo que no podía quedar por fuera es el potente volcán Masaya, único en la región, que con su lago de lava y el maravilloso resplandor que rebotaba, es el único personaje de esta pieza fílmica que se le concedió su tiempo y espacio.
Destyn grabó varias piezas del video con dron, destacando la arquitectura y belleza durante el atardecer en Granada, las costas de Rivas y una larga exposición del volcán Concepción en la isla de Ometepe.
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