Parece una broma, pero no, es completamente real: Ocurre en Eslovaquia, en el campo de fútbol del TJ Tatran Cerny Balog. La vía cruza por el campo dividiendo el terreno de juego y las gradas.
Es muy habitual que en mitad de un partido pase el tren sin ningún tipo de problema. Los jugadores ni se inmutan porque ya lo consideran habitual.