Ed Houben, pensaba que jamás iba a volver a tener sexo. Se sentía el hombre menos atractivo del mundo y estaba seguro que una mujer jamás consideraría tocarlo de nuevo la última vez que se había acostado con alguien fue 10 años atrás.
Entonces, convencido de que nunca formaría una familia, tomó la decisión de convertirse en un donador de esperma.
De alguna manera, ser un donador de esperma definió su vida, pero el proceso era demasiado impersonal para él. Estaba esperando que el regalo de la vida fuera recibido con sirenas y fanfarrias, pero fue exactamente lo contrario: ah, sí, déjalo en la mesa. Entre más tiempo pasaba, más necesitaba que las cosas fueran diferentes. Así fue como empezó a hacer visitas a domicilio.
Ed Houben, Inseminación Natural a Domicilio
Houben obtenía la muestra en el baño de abajo, para luego entregársela directamente a los clientes. Así pesaba que sería cuando visitó a un matrimonio en Amsterdam, pero la pareja no quería que su hijo fuera concebido en un laboratorio. Ed Houben terminó acostándose con la mujer, mientras su esposo estaba con ellos en la cama. Esa fue su primera inseminación natural.
Éramos tres personas en la cama, y yo estaba tan sorprendido que no supe qué decir. Tenía esta lucha dentro de mí mi cabeza llena de pensamientos no estimulantes pero él nunca me tocó accidentalmente. Quería estar presente mientras su hijo estaba siendo creado.
Después de esto, Ed comenzó a acostarse con decenas de mujeres que querían convertirse en madres. Ahora, a sus 46 años, Ed Houben tiene 106 hijos. Dos terceras partes fueron concebidos de manera natural, y los demás mediante inseminación artificial. Según la BBC, es el hombre más viril, aunque él se describe a sí mismo como un hombre realmente feo y gordo con lentes.
Soy rico en hijos, pero no en dinero. He ayudado a gente rica, gente pobre, gente que es famosa en su país. Todos vienen porque han alcanzado una punto de desesperación con nuestro sistema de salud, y me ofrezco como una mejor opción que un revolcón de una noche.
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