Un hombre que hacía una caminata por el parque nacional de Glaciares, en Montana, Estados Unidos, se encontró sorpresivamente en el camino a un puma salvaje.
El hombre asustado no tuvo más remedio que permanecer en el mismo lugar donde se encontraba, y se las arregló gritándole al animal salvaje para que se alejara de él. Mientras que el felino entendió y siguió su camino, dejando al hombre respirar libremente.