Bomberos de China rescataron un niño de seis años de edad que se quedo atrapado en un pozo después de caer accidentalmente.
El pozo era de siete a ocho metros de profundidad y el grueso de un diámetro de 30 centímetros, era demasiado pequeña para un adulto y poder entrar para el rescate del muchacho.
Los bomberos hicieron dos nudos corredizos de una cuerda y se las ingeniaron para poder sacarlo.
Agencias