José Miguel Pastora Arteta y Ernesto García Omier fueron detenidos en una vivienda del barrio Boris Vega, en el preciso momento que abastecían de drogas a otros jóvenes. La Policía los detuvo y los puso tras las rejas.
El modo operando de los expendedores era vender supuesto veneno para ratas, no obstante, lo que en realidad ofrecían eran piedras crack.
Pastora Arteta negó que le hayan encontrado el estupefaciente mientras su acompañante identificado como Ernesto García, no solo negó el hecho sino que aseguró que no consume, vende; ni baila pegado.
La institución uniformada remitirá el caso ante las instancias correspondientes para su debido proceso.
Jimmy Alvarado
