Un nuevo camino hacia el arte se abre puerta en la nación, administrando como materia prima los objetos de metal que la mayoría de personas desecha a diario para ser transformados en valiosas obras artísticas que aportan al cuido y protección del medio ambiente a través de Art-Metal Nicaragua.
La cadena que alguna vez cumplió la función de transmitir el giro del motor a la rueda trasera de una moto, dejó atrás sus días en el conjunto de metal desecho de alguna “chatarrera” del país, ahora está más brillante que nunca sobre la base de concreto que se extiende a lo largo, donde la concentración empleada en la entrada de calor hará que se fusioné con la pesada platina de hierro rectangular, las tuercas, arandelas, engranaje, rotulas de vehículo y el resorte, elementos que tras el chisporroteo, conforman una cámara fotográfica diseñada por el equipo innovador de Art Metal Nicaragua.
Transformar el metal reciclado en arte, surgió cuando el viejo jeep familiar del 65 se descompuso, el preciado vehículo que albergaba tantas anécdotas de vida, inspiró a la joven de 19 años, cabello largo oscuro, delgada y estudiante de Comunicación Social, Ania Peralta, quien junto a su primo Nelson Rugama y unos amigos deciden darle uso y vida a algunas piezas desechadas en la reparación del automotor, realizando con ellas una pequeña réplica del vehículo que les valió la admiración de sus familiares, quienes los impulsaron a emprender con Art-Metal Nicaragua.
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En ese momento vislumbró la idea de elaborar artículos decorativos a partir de piezas en desusos de los talleres de mecánicas o “chatarreras”, iniciando con su equipo de trabajo a buscar fuentes de inspiraciones, generando diseños como búhos, motocicletas, cámaras fotográficas, entre otras creaciones que salieron a la luz una vez que el 12 de abril del 2019 se establecieron en las redes sociales como Art- Metal Nicaragua.
En sus primeras semanas Art-Metal Nicaragua no obtiene los pedidos deseados, pero fue la participación en una feria de verano lo que permite generar un punto de contacto de la marca con el cliente potencial del producto, que se traduce en aceptación, así sucesivamente surgen múltiples pedidos que dan inicio a nuevas formas de objetos, contribuyendo a la perfección de su creatividad y técnica con cada obra.
Apostando por la innovación
Peralta reconoce que la mayor satisfacción del trabajo en Art-Metal Nicaragua es brindar a los espacios decorativos un ambiente eco-amigable, encontrando su arte la mayor fuerza de acción en las tres R del medioambiente: reducir, reciclar y reusar. También poseen una segunda línea de producción con tubos galvanizados, dirigida a la personalización de dispensadores y lámparas, que cobran vida con la imagen de un corredor hasta un hombre araña, según sea el gusto del cliente, manteniéndose fiel a su compromiso con la madre tierra y la creatividad.
A tan solo unos meses de formación Art-Metal Nicaragua aprovecha las grandes ventajas de accesibilidad que ofrece el coworking, una forma de trabajo que permite a los emprendedores de diferentes sectores compartir un mismo espacio físico, con el fin de desarrollar sus proyectos se suma a otros emprendimientos ubicados en la segunda entrada a las Colinas en la capital Managua, exactamente en Plaza Isabella, módulo 10, estableciéndose un 12 de julio del presente año con su tienda en físico.
Consciente que el espacio de posicionamiento es muy importante frente a su público target, amplía su personal de dos a cinco personas, quienes laboran en áreas como: administración, marketing y ventas. Además, realiza los trámites correspondientes para cumplir con la normativa que la ley exige, aligerando el paso para alcanzar su objetivo final: internacionalizar el producto, una operación estratégica que está segura de lograr con paciencia, dedicación, creatividad e innovación, teniendo presente su clave del éxito: “creer en tu producto, perder tus miedos y salir de la zona de confort”.
