El pájaro Tininiska, conocido en el Pacífico como gorrión, es un símbolo de las regiones caribeñas nicaragüenses. Esta pequeña ave ha inspirado poetas, cantautores y también a Tania Muñoz, una abogada especializada en impuestos que nombró así a su empresa de chocolates.
La familia de Tania lleva años trabajando por el mejoramiento de la semilla de cacao. El cuidado y el esmero han dado resultados que hoy cosechan. “Nosotros tenemos una agropecuaria en Waslala, donde molemos cacao de calidad y orgánico y hemos decidido transformar esos granos de cacao en un delicioso chocolate”, comenta a Tn8.tv.
Lee también: "Art Grill", nueva oferta gastronómica de jóvenes nicaragüenses
Esta combinación de técnicas para mantener la calidad en granos y en la fabricación del chocolate han dado paso a diferentes presentaciones de productos que hoy están entre la oferta de esta pequeña empresa familiar. “Tenemos chocolate de barra, tabletas, bombones, trufas y nips” asegura Tania.
Alcanzando reconocimiento internacional
“Tininiska” ha conquistado estándares internacionales, siendo estrictos con la calidad para lograr el mejor sabor que es combinado con frutas de temporada, permitiendo la textura adecuada que combinan desde la producción orgánica que realizan en la finca de su familia ubicada en las frescas montañas de Waslala.
Para diferenciarse de los otros productores en este rubro han enfocado sus esfuerzos en llevar el control del proceso productivo completo, o lo que ellos llaman desde el grano hasta la tienda. “El bean to bar, nosotros hacemos desde el grano hasta la tableta, todo el proceso de fermentado, secado, hecho y manejado por nosotras mismas. Eso nos hace diferentes porque tenemos todo el proceso desde la cosecha hasta la tableta”, enfatiza a Voces de Éxito.
En la cuarta etapa del Puerto Salvador Allende hace poco inauguraron un módulo en el que se puede encontrar cacao en polvo, fermentado, en pasta y su producto estrella, el chocolate artesanal. Con éste han conquistado premios en contiendas de alto nivel en el que participaron productores de los principales países productores de cacao. “El año pasado participamos en una competencia internacional donde fuimos galardonadas con bronce, nuestra tableta oscura ganó bronce, eso nos motivó con el proyecto, a seguir buscando calidad”, cuenta orgullosa Tania.
Confianza para invertir en Nicaragua
Los nuevos espacios de recreación resultan perfectos para los emprendimientos que ofrecen productos de consumo. Por eso Tania y su familia escogieron un punto estratégico donde llegan a las familias directamente sin intermediarios. “Aquí estamos en la cuarta etapa del Salvador Allende, no solo ofrecemos chocolate como tableta también tenemos la bebida chocolate caliente, refrescos de cacao y otras bebidas naturales”, comentó.
Como es común en los pequeños negocios, toda la familia se va involucrando de una manera u otra para que la inversión surja y de los frutos esperados. “Mi mamá me asegura la calidad del grano, mi esposo se encarga de la publicidad y el mercadeo y mi hija aprendiendo en casa conmigo”, asegura Muñoz.
Tania confía en que la mejor manera de crecer como país es trabajando, invirtiendo en Nicaragua y en su gente. “Yo quiero que Nicaragua sea conocida además de sabores gourmet como el tabaco, como el café, el cacao, el grano de cacao que se está produciendo también es de calidad”, finalizó esta joven emprendedora.