Trabajar la madera es un arte que no todos pueden explotar. En Niquinohomo, Mueblería Galán Ruíz, saca mucho provecho a este recurso natural, para satisfacer el gusto de cada cliente.
"Nosotros aquí tenemos muebles de sala, muebles de comedor, muebles de terraza, pero si el cliente viene a buscar algo diferente nosotros aquí tenemos catálogo y le ofrecemos la innovación y el cliente se va satisfecho", expresó Víctor Gaitán, propietario de Mueblería Galán Ruíz.
Con ocho años de actividad comercial, sus propietarios ven que el sueño pasó a una realidad con este emprendimiento que se actualiza constantemente.
"Que le damos trabajo a muchas personas, hemos visto el crecimiento año con año, a la par de que nos ayuda el Gobierno a capacitarnos, nos han capacitado en calidad y en administración", sostuvo Liliam Ruíz, propietaria de mueblería.
A través del programa gubernamental 80/20, que es de innovación tecnológica y equipamiento de maquinaria, es que esta empresa familiar transformó los muebles rústicos tallados con los cuales iniciaron a obras con valor agregado.
"Le aplicamos la fineza del mueble y le aplicamos el valor agregado. Si los clientes los quieren tapizados o si los clientes enviárselos a su casa, entonces nosotros contamos con el servicio de envío", añadió Don Víctor.
"El comedor más económico que tenemos le cuesta 8,500 córdobas hasta el más caro le cuesta 25 mil, eso depende del tipo de diseño y el tipo de madera que quiera el cliente", detalló la segunda al cargo de esta empresa.
El negocio es rentable, permitiendo la generación de empleo y aunque por ahora abastecen el mercado nacional, la visión es traspasar las fronteras.
"Bueno en esta mueblería tengo yo alrededor de cinco años de trabajar y ha sido un mantenimiento estable para mi familia, he podido salir adelante con el salario que obtengo en esta mueblería. Yo hago todo tipo de muebles, me ponen a hacer chineros, gaveteros, roperos, muebles de cocina, lo que es todo el ramo yo lo domino", refirió el trabajador Iván Sandino.
Comedor, ropero, muebles para cocina, entre otros productos son producidos con empeños en este taller de carpintería y dados a conocer en la ferias de economía familiar.
"Hacemos muebles de calidad, porque le ofrecemos al cliente 100% madera y estamos al alcance del bolsillo de los clientes", concluyó el emprendedor Víctor.
De este oficio tradicional esta familia se destaca por su aporte en la economía nacional. Con su ejemplo, motiva a los nicaragüenses a emprender con un negocio propio, para tener un mejor futuro.