El mundo está lleno de posibilidades. Las mujeres buscan mezclar sus pasatiempos de manera que les ayuden a generar ingresos, así fue que nació Mimos y Monerías, cuando Karla Martínez se cansó de trabajar en la empresa privada a pesar de tener una carrera exitosa de ocho años como ingeniera en computación.
“Considero que en un inicio es difícil, desarrollé mi carrera y me dí cuenta que las manualidades me gustaban”, comenta. En paralelo empezó a vender lazos, los hacía los fines de semana y daba clases a otras personas interesadas en aprender el oficio.
Por eso Karla se convenció que lo mejor era montar de manera formal una empresa que se dedicara a darle soluciones a la gente que buscaba accesorios, manualidades, creaciones personalizadas en porcelana fina y pintura country.
Después de un tiempo Karla identificó que la gente también buscaba otras cosas, cintas decoradas, piedras, perlas y vio que para hacer todo lo necesario para hacer las cosas que los clientes deseaban, empezó a importar materiales para manualidades. “Una cosa unió a la otra y comenzamos a comercializar materiales y comenzamos a darle otro proceso creativo”, señala.
La formalización de las empresas ante la DGI garantizan beneficios a los propietarios, algo que esta joven reconoce. “La subcontratación de empresas que no te contratan si no girás factura, te exigen facturas… el bienestar de nuestras colaboradoras que ya todas tienen INSS…”, enumera Karla.
Con esta medida ella garantiza trabajos que le generan mayores ingresos y poder irse abriendo camino dentro del sector empresarial.
Mimos y Monerías ya empieza a diversificar sus servicios, ahora crearon una división encargada de organizar, decorar y animar fiestas de cumpleaños, eventos sociales y empresariales, todo de una forma original y con lo cual ha tenido un éxito rotundo. Según Martínez “la fiesta es algo exponencial, somos pioneros en la forma que hacemos la decoración”.
Cuando de emprender se trata, lo mejor según nos recomienda esta empresaria es mantenerse bien enfocados pues nuestros esfuerzos se diluyen con facilidad si tenemos múltiples objetivos. “Descuidamos la meta, debemos enfocarnos y siempre darle un plus al producto que ofrecen”, finaliza Karla.