Agentes de policía del estado de Ohio Estados Unidos, para apoyar la seguridad durante la Convención Nacional Republicana llevada a cabo del 15 al 18 de julio, dispararon mortalmente el martes a un hombre afroamericano; recogen medios locales.
Los agentes involucrados aseguraron que el individuo, identificado como Samuel Sharpe Jr.; estaba armado con dos cuchillos e intentó atacar a otro que se encontraba desarmado, por lo que intervinieron.
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Cuando el sospechoso se negó a soltar los cuchillos, cinco de los 13 policías abrieron fuego, matándolo.
De acuerdo con Elaine Bryant, jefa de la División de Policía de Columbus, Ohio, el tiroteo se produjo dentro del perímetro de seguridad exterior de la convención; donde estaban asignados los agentes de Estados Unidos.
Tiroteo en Estados Unidos
Después del intento de asesinato del candidato republicano Donald Trump, las medidas de seguridad se han endurecido.
La Policía de Estados Unidos, hizo público un video de 31 segundos de la cámara corporal de un oficial implicado en el tiroteo. En las imágenes se ve a los agentes percatarse del altercado entre los dos hombres y se oye a uno de ellos afirmar; «Él [Sharpe] tiene un cuchillo«.
Inmediatamente, los uniformados desenfundan sus armas y empiezan a correr, gritándole que suelte el cuchillo. Al acercarse; abren fuego contra Sharpe, de 43 años, que cae al suelo. Su familia aseguró que los agentes dispararon 27 veces.
La hermana, Angelique; declaró para CNN que, aunque no está segura de la naturaleza del altercado, Sharpe le había contado ese mismo día a su familia que unos hombres lo habían amenazado a muerte a él y a su perro.
Colombus, Ohio Police have released 30 seconds of Bodycam footage of one of the officers who shot and killed Samuel Sharpe in Milwaukee, WI
The officers were in town as part of mutual aid for the Republican National Convention in Milwaukee. pic.twitter.com/VPx2epAkxN
— Sean Beckner-Carmitchel (@ACatWithNews) July 17, 2024
Mientras las autoridades de Estados Unidos, han defendido las acciones de los agentes, argumentando que «la vida de una persona estaba en peligro»; activistas aseguran que fue excesivo dispararle sin conocer la situación y que debieron electrocutarlo o inmovilizarlo.
Asimismo, algunas personas afirman que los agentes no estaban dentro de la zona perimetral y acusaron a la Policía de no ser transparente.
