Bajo el ojo del huracán se encuentra el pastor de una iglesia evangélica en San José, California, tras la muerte de una niña de tres años, a quien le practicaron un exorcismo y terminó perdiendo la vida por asfixia.
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El asesinato salió a luz luego de que la Policía iniciara la búsqueda de un bebé de tres meses que había sido secuestrado por miembros de la congregación; a la que también pertenecían la madre y la abuela del pequeño.
Por lo tanto, es así como, en medio de las investigaciones, las autoridades conocieron el caso de la menor, quien falleció en septiembre del año pasado tras haber sido sometida a un presunto exorcismo.
Muere una niña tras un exorcismo en California
Según lo informó la Policía, los familiares pensaban que la niña estaba “poseída por el demonio”, debido a que se despertaba llorando y gritaba por las noches.
Por ese motivo, su madre; Claudia Hernández, de 25 años, la llevó al templo; para el pastor, que también es abuelo de la pequeña, la practicara el exorcismo.
Allí, tal y como lo contó Hernández, la retuvieron por más de siete horas. Y entonces ocurrieron los hechos.
Las autoridades de California informaron que el crimen es catalogado como un homicidio. Mientras que a la madre la arretaron y actualmente enfrenta cargos por agresión infantil. En tanto, el pastor de la congregación alegó que la muerte de su nieta se dio porque es “la voluntad de Dios”.
De la misma manera, el pastor aseguró que “No se trata de lo que yo quiera hacer, sino de que en la voluntad de Dios esté el sanar a esa persona. El predicador es un instrumento de Dios, hacemos lo que él dice”.
