El juez de la corte del condado de Jefferson, Bruce Jones, se molestó con el gobernador de Colorado porque sin avisarle; redujo la sentencia de 110 años al camionero quien perdió los frenos y provocó un accidente que dejó un saldo de cuatro personas muertas.
La sentencia de Rogel Aguilera-Mederos era por más de 24 delitos por un incidente que ocurrió en 2019, si bien la decisión de 110 años en prisión fue considerada como una exageración; el gobierno de Estados Unidos realizaría otras audiencia para reducir el castigo la cual tenía un estimado de 20 a 30 años; sin embargo, el dirigente Jared Polis se adelantó y redujo aún más los años de cárcel.
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Tras enterarse de lo ocurrido, el juez canceló la nueva audiencia e indicó que el tribunal no recibió ninguna notificación formal y se enteraron a través de las noticias locales. Debido a ello, Bruce Jones indicó que el tribunal respeta la autoridad del gobernador para hacerlo; pero parece que “al momento de la decisión, este respeto no es mutuo”.
La fiscal del primer distrito judicial, Alexis King, también se pronunció y aseguró que la decisión del gobernador Jared Polis fue prematura porque el propio dirigente habría dicho que la sentencia sería de 20 a 30 años para el camionero.
Incluso Duane Bailey, quien perdió a su hermano en el accidente, declaró que todos los familiares de las otras víctimas se reunieron con el gobernador de Colorado y le pidieron que no interviniera porque apoyaban el periodo estimado.
Presión social ante sentencia
“Pensamos que el gobernador debería quedarse fuera si lo hiciera. Pensamos que el gobernador estaba demasiado impaciente. solo tuvo que esperar dos semanas; debería haber dejado que el proceso se desarrollara”, expresó Bailey.
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El cambio de decisión ya fue anunciado por Jared Polis, y en una carta afirmó que dicha sentencia era un castigo inapropiado. Asimismo, indicó que existía una urgencia para remediar el asunto y “restaurar la confianza en la uniformidad y equidad de nuestro sistema de justicia penal“.
No obstante, Duane Bailey cree que en realidad la postura del gobernador se produjo por la presión social y las posibles reacciones violentas porque al menos 5 millones de personas firmaron la sentencia para cambiar el castigo.