Una mujer intentó asfixiar a su bebé con una manta porqué era «malvado y gruñía»; la mujer ya fue detenida y puesta a disposición de las autoridades.
Los hechos sucedieron en Las Vegas, Estados Unidos; la madre afirmó que el recién nacido le “gruñía” y tenía un olor anormal; luego intentó quitarse la vida golpeándose con una roca en el rostro.
La mujer de 23 años identificada como Ashley fue detenida por las autoridades de Las Vegas luego de que trató de asesinar a su bebé unas horas después del parto; además se le acusa de asesinato y abuso infantil.
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Los hechos sucedieron el pasado sábado 26 de marzo, cuando Ashley dio a luz en el inodoro del baño de invitados de una casa de los familiares del novio, pues se estaban quedando ahí debido a la fecha cercana al parto; por lo que querían estar cerca de un hospital.
Según la investigación del Departamento de Policía, el novio “entró al baño y observó a Ashley de pie, de espaldas al inodoro. Él describió a Ashley con una mirada confundida en su rostro”.
Entonces miró al bebé dentro del inodoro, lo tomó en brazos y decidió que irían al hospital; por lo que la pareja subió al auto. Ashley tomó al bebé y lo puso en su regazo mientras su novio conducía, fue en ese momento que se dio el supuesto intento de asesinato.
“Después de ver los ojos del bebé; oler lo que describió como un olor anormal y el bebé gruñéndole, Ashley decidió envolver la cabeza del bebé con la manta y la presionó contra su cara y nariz” intentando asfixiarlo; dice el informe del arresto.
Tras llegar al hospital la madrugada del domingo; Ashley se negó a entrar y se fue del lugar hasta ser encontrada dos horas más tarde con una “contusión que tenía una hinchazón considerable en el lado izquierdo de la cabeza”.
Creía que su hijo era un bebé malvado
La joven declaró primeramente que había sido golpeada; sin embargo un médico afirmó que se trataba de golpes autoinflingidos; versión que luego confirmó la mujer diciendo que quería morir y se había herido con una roca tras golpearse al menos 15 veces.
“Ashley habló continuamente sobre profecías y otras ideas religiosas al personal de enfermería mientras estaba en el hospital” reveló el informe de la policía según Law and Crime.
De acuerdo a Ashley, el bebé era “malvado” y “le gruñía”, además se refirió a él como un “bebé diabólico”, por lo que quería matarlo.
Por su parte, los médicos que brindaron atención al bebé recién nacido creyeron que pudo “haber sufrido una hemorragia cerebral y una lesión cerebral anóxica»; sin embargo este martes 29 de marzo «el personal médico que trataba al bebé determinó que era probable que no hubiera sufrido lesiones«.
La investigación policial ha continuado; todo parece indicar que Ashley tiene una afección médica para la cual le recetaron medicamentos a los 19 años, pero estos fueron suspendidos por el embarazo; además es madre de otros dos menores.
Ahora la mujer de 23 años se encuentra a la espera de la lectura de cargos programada para este lunes 4 de abril en Las Vegas; mientras permanece detenida sin derecho a fianza en el Centro de Detención del Condado de Clark.
Por Quinta Fuerza
