Autoridades en San Francisco, CA., están tratando de determinar qué fue exactamente lo que ocurrió al momento de la impactante muerte de Amy Adams, una mujer de 41 años que murió arrastrada por un tren luego de aparentemente quedar atorada con la correa de su mascota.
El rarísimo incidente ocurrió la tarde de este lunes en la estación de Powell Street del sistema de transporte público Bay Area Rapid Transit (BART, por sus siglas en inglés).
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De acuerdo con la emisora local ABC-7 la mujer se encontraba en la plataforma esperando el tren con su perro atado a su cintura.
Cuando el tren con dirección hacia Dublin/Pleasanton arribó a la estación la mujer abordó pero al parecer de último momento decidió bajarse. Sin embargo su perro no lo hizo, quedándose dentro del vagón cuyas puertas se cerraron. Fue entonces que el tren echó a andar arrastrando a la pasajera.
«Fue muy traumático», exclamó a dicha cadena Mike Sim uno de los pasajeros que presenciaron la terrible escena. «Todos estaban en shock. Hizo un ruido dut, dut, dut, dut, dut».
De acuerdo con el diario New York Post portavoces de BART informaron que la mujer intentó llamar la atención de un hombre que se encontraba en la plataforma. «Él dijo: ‘¡Mi novia! ¡Mi novia!'»
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Se desconoce al momento si se trataba de un perro de compañía o terapéutico, lo que se sabe es que el animal resultó ileso. No así su dueña, quien falleció a consecuencia de sus heridas.
«Esta es la pérdida trágica de una vida», dijo por medio de un comunicado Alicia Trost, portavoz de BART. «Estamos siguiendo los protocolos de seguridad», afirmó sobre la investigación que continúa.
