Shamaya Lynn, una mujer de 21 años de Florida (EE.UU.) falleció el pasado 11 de agosto luego de recibir un disparo a la cabeza por su propio bebé durante una videollamada de trabajo por Zoom, informó el Departamento de Policía de Altamonte Springs.
La persona que apretó el gatillo fue el propio bebé de Lynn, quien habría encontrado «una pistola cargada que un adulto dejó sin asegurar en el apartamento».
Las autoridades recibieron aviso de lo ocurrido por uno de los colegas de Lynn, quien contó que durante la videollamada se pudo ver a un bebé andando detrás de la mujer y que esta se desplomó de espaldas tras escucharse un fuerte ruido.
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Arma del padre del bebé
«Los oficiales y paramédicos hicieron todo lo posible para ayudar a la Sra. Lynn, pero la encontraron con una herida de bala fatal en la cabeza», se especifica en el comunicado.
Los investigadores también dijeron que el arma pertenecía al padre del bebé. Ambos niños resultaron ilesos.
En estos momentos, los detectives están trabajando con la Oficina del Fiscal del Condado de Seminole para determinar si el propietario del arma enfrentará cargos penales.
Accidentes con armas y niños
El año pasado hubo al menos 369 disparos involuntarios de niños menores de 18 años en los EE. UU., con 142 muertes, según el grupo de defensa del control de armas Everytown for Gun Safety.
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En febrero, una madre de cinco hijos de 25 años en Carolina del Norte resulto asesinada a tiros sin querer después de que sus hijos encontraron un arma en su bolso, dijo la policía de la ciudad de Cornelius.
Y en abril, un bebé de tres años en Houston encontró un arma de fuego no asegurada y le disparó fatalmente a su hermano de ocho meses, dijo la policía.
Por RT