La Corte Suprema de Estados Unidos anuló la vigencia del histórico caso Roe contra Wade de 1973, en el que la misma instancia judicial reconocía que la constitución del país protege la libertad de la mujer para interrumpir el embarazo. El fallo finaliza las garantías constitucionales que durante casi 50 años amparaban a la mujer estadounidense para poder abortar.
La decisión podría conducir a la prohibición del aborto en, aproximadamente, la mitad de los estados de la nación. Según estadísticas analizadas por AP, la derogación va a afectar de forma desproporcionada a las mujeres de las minorías, que tienen ya de por sí un acceso limitado a la atención sanitaria.
La sentencia parte literalmente al país en dos. Prominentes asociaciones en favor del derecho de las mujeres a decidir, como el Instituto Guttmacher o Planned Parenthood, calculan que tras la caída de Roe, 26 Estados acabarán prohibiendo en mayor o menor medida el aborto. Ahí incluyen a Alabama, Arkansas, Arizona, Florida, Georgia, Idaho, Indiana, Iowa, Kentucky, Louisiana, Míchigan, Misisipi, Misuri, Montana, Nebraska, Dakota del Norte, Ohio, Oklahoma, las Carolinas, Tennessee, Texas, Utah, Virginia Occidental, Wisconsin y Wyoming. Trece de esos 26 estados tienen preparados textos conocidos como trigger laws (leyes gatillo), que podrían activarse de inmediato o en los próximos días o semanas.
¿A qué se debe la sentencia del Tribunal Supremo?
La sentencia del Supremo es una respuesta a un recurso presentado por el estado de Misisipi; después de que varios tribunales rechazasen leyes que, en la práctica, suponían la casi prohibición total del aborto. La primera ley en cuestión prohíbe el aborto a partir de las 15 semanas de gestación; con la única excepción de deformaciones graves del feto o emergencia médica. La otra ley plantea un veto a la interrupción del embarazo desde el momento en que se detecta el latido del corazón, que se puede dar entre las seis y 12 primeras semanas.
En Estados Unidos, no hay ninguna ley que permita el aborto a nivel federal; lo que existen son dos sentencias fundamentales del Tribunal Supremo, Roe v. Wade y Planned Parenthood v. Casey, que prohibieron vetar el aborto en todo el país hasta la viabilidad del feto, es decir, cuando puede vivir fuera del útero; lo que según el Supremo, está entre 23 y 24 semanas. Norma McCorvey, conocida por el pseudónimo Jane Roe, denunció a su fiscal de distrito, Henry Wade, porque quería abortar; pero la ley de Texas no se lo permitía. El juzgado le dio la razón, pero Texas recurrió al Supremo, que consideró que el aborto era un derecho.