Un niño guatemalteco de 4 años lucha por su vida en un hospital de Los Ángeles, tras recibir una golpiza. La persona acusada de atacarlo es su madre de acogida, Gabriela Casarez, quien enfrenta cargos de abuso infantil y de agresión.
Casarez fue arrestada y sigue en la cárcel del condado de Los Ángeles con una fianza de 1.2 millones de dólares. Según reportes, la agresión dejó al pequeño en estado de coma o parálisis. Casarez se declaró inocente y tendrá que presentarse en la corte el 6 de diciembre.
El niño sigue en cuidados intensivos. Su tía, María Jacinto, dice que el menor fue llevado inconsciente al hospital y que no ha despertado. «Nos dijeron que la probabilidad de que sobreviva era ninguna«; dijo en una rueda de prensa.
Jacinto es la prima hermana de la madre biológica del niño, quien bajo los cuidados de una familia de acogida por orden del condado de Los Ángeles, informa Telemundo.
«Ningún niño se merece esto, en ningún caso, bajo el cuidado de nadie»; lamentó la tía. «Solo estamos pidiendo justicia e información».
El 28 de octubre, el Departamento del Sheriff de Los Ángeles respondió a una llamada por presunto abuso físico contra un menor de 4 años en la ciudad de Norwalk, cerca de Los Ángeles.
«La víctima sufrió graves lesiones que provocaron su ingreso en la unidad de cuidados intensivos de un hospital, donde su estado sigue siendo crítico«; informaron las autoridades en un comunicado.
Según reportes, el niño vivía con su madre de acogida desde abril, cuando fue retirado del cuidado de su madre biológica. Casarez también estaba cuidando a su hermanito de 2 años.
El Sheriff de Los Ángeles investiga el caso de violencia
«No tenemos evidencia que alguien más estuviera en familia adoptiva. Además hay pruebas claras de que lo torturaron y golpearon hasta dejarlo en coma»; dijo a la prensa Michel Adler, uno de los abogados de la familia del niño.
Los hermanitos nacieron en Guatemala y no hablan español ni inglés. «Hablan en dialecto»; dijo su tía. «¿Cómo van a hablar, cómo van a defenderse?; preguntó entre lágrimas Jacinto.
El Departamento de Servicios y Familia del condado de Los Ángeles dijo que investigan a fondo las denuncias de abuso y negligencia de los proveedores de cuidado a menores. «Se supone que ellos se los llevan para estar mejor»; lamentó la tía.