Tras una serie de protestas en EE.UU. contra la brutalidad policial, provocadas por la muerte del afroamericano George Floyd, el Consejo de la ciudad de Mineápolis aprobó este viernes por unanimidad la reforma inmediata del Departamento de Policía, que incluye la prohibición del uso de técnicas de estrangulamiento por parte de los agentes, comunicó el organismo.
Además, el documento requiere que los oficiales "independientemente de su cargo o rango" reporten e intervengan cada vez que vean el uso de métodos no autorizados por sus colegas.
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La junta de emergencia fue convocada este jueves, después de que la comisionada del Departamento de Derechos Humanos de Minesota, Rebecca Lucero, presentara este lunes cargos por discriminación y solicitara una orden de restricción temporal contra ciertas normas que aplica el Departamento de Policía de Mineápolis, luego de la muerte de Floyd, el pasado 25 de mayo.
Ahora, el Tribunal del Distrito del Condado de Hennepin debe aprobar dicha iniciativa.
En unos sí, en otros no
En Nueva York, una de las ciudades en las que se han protagonizado protestas por la muerte de George Floyd, el Departamento de Policía prohíbe el uso de estrangulamientos y acciones como sentarse, arrodillarse o pararse sobre el pecho o espalda del sujeto, lo que reduce su capacidad para respirar. Pero no ocurre lo mismo en San Diego, donde se permite bloquear en flujo de sangre aplicando presión en el cuello con el brazo, pero según el jefe de policía David Nisleit, se prohibirá esa técnica.
En países como Alemania se permite a la policía ejercer presión lateral sobre la cabeza de un sospechoso, pero debe ser por poco tiempo y no en el cuello. En el Reino Unido, los detenidos, “tan pronto como sea posible”, deben estar sentados, arrodillados o de pie. No se recomienda ningún tipo de presión sobre el cuello, porque “puede ser muy peligrosa”.
La gendarmería de Francia desaconseja presionar el pecho y los órganos vitales de los detenidos y “ya no se les enseña aplicar presión en el cuello. No es necesario ser médico para comprender que es peligroso”, dijo el coronel Laurent De La Follye de Joux, jefe de entrenamiento de la fuerza.
No obstante, la Policía Nacional del país sí puede presionar el pecho de un sospechoso, pero por poco tiempo.
“Todas las policías del mundo utilizan estas técnicas porque representan la menor cantidad de peligro. Lo único es que tienen que ser bien utilizadas. En los Estados Unidos vimos que (con George Floyd) no se usó bien, que la presión se aplicó en el lugar equivocado y durante demasiado tiempo”, dijo Christophe Rouget, un funcionario del sindicato de la policía de Francia.