El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, ha anunciado que en las últimas 24 horas se han registrado 752 muertes en la región. La cifra refleja un ligero descenso frente al incremento registrado el día anterior con 778 casos.
En sus recientes declaraciones, el funcionario señaló que "el sistema de salud se ha estabilizado". Sin embargo, aclaró que la crisis "terminará cuando tengamos una vacuna", la misma que se espera dentro de 12 o 18 meses.
El gobernador destacó que las hospitalizaciones por COVID-19 también cayeron por segundo día consecutivo y que gracias a la estabilización mencionada incluso se podría enviar respiradores a otros estados. De momento, se anunció la entrega de 100 ventiladores a Michigan y 50 a Maryland.
Tras el desbordamiento de las morgues, Nueva York entierra "temporalmente" en un parque de la ciudad los féretros de los muertos por coronavirus que nadie reclama. Estas son imágenes de la fosa común https://t.co/LodLsgeFAi pic.twitter.com/IIRc7O3kPK
— EL PAÍS América (@elpais_america) April 10, 2020
El estado más afectado
Entre otros detalles, el gobernador indicó que "nadie tiene la culpa" de los problemas con la adquisición de respiradores y la falta de pruebas para confirmar los casos. Sin embargo, reiteró que Nueva York ha realizado más de 500.000 pruebas de coronavirus, "más que cualquier otro estado".
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Además, el funcionario explicó que la reapertura de actividades será gradual, priorizando la salud pública. En este sentido, comentó que la reactivación de los negocios dependerá de qué tan esencial es y el riesgo de infección que implica.
Nueva York ha sido el estado más afectado por la pandemia en EE.UU., abarcando más de un tercio de los casos confirmados en el territorio norteamericano y aproximadamente la mitad de las víctimas mortales en el país, informó la agencia de noticias rusa RT.