(Reuters) – Funcionarios de salud estadounidenses dijeron el viernes que se están preparando para la posibilidad de la propagación del nuevo coronavirus a través de las comunidades estadounidenses que obligaría al cierre de escuelas y negocios.
Estados Unidos aún no ha visto la propagación comunitaria del virus que surgió en el centro de China a fines de diciembre. Pero las autoridades sanitarias están preparando al personal médico para el riesgo, dijo Nancy Messonnier, una funcionaria de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en una conferencia telefónica.
En las próximas semanas, si el virus comienza a extenderse a través de las comunidades estadounidenses, las autoridades de salud quieren estar listas para adoptar cierres de escuelas y negocios como los emprendidos en países asiáticos para contener la enfermedad, dijo Messonnier.
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"Todavía no estamos viendo la propagación de la comunidad aquí en los Estados Unidos, pero es muy posible, incluso probable, que eventualmente suceda", dijo Messonnier.
"Nuestro objetivo sigue siendo retrasar la introducción del virus en los Estados Unidos. Esto nos da más tiempo para preparar a las comunidades para más casos y posiblemente una propagación sostenida".
Los CDC están tomando medidas para garantizar que los trabajadores de atención médica de primera línea de EE. UU. Tengan los suministros que necesitan, agregó, trabajando con empresas, hospitales, farmacias y fabricantes y distribuidores de provisiones sobre lo que pueden hacer para prepararse.
La Organización Mundial de la Salud advirtió que se estaba cerrando la ventana de oportunidad para contener la propagación internacional de la epidemia que ha matado a más de 2.200 personas, ya que el virus se ha extendido a unos 26 países con un gran grupo en Corea del Sur y brotes recientes en Irán , Líbano e Italia
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"Si lo hacemos bien, podemos evitar cualquier crisis grave, pero si desperdiciamos la oportunidad tendremos un problema grave en nuestras manos", dijo el jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en Ginebra.
Estados Unidos tiene actualmente 13 casos de personas diagnosticadas con el virus dentro del país y 21 casos entre estadounidenses repatriados en vuelos de evacuación desde Wuhan, China, y desde el crucero Diamond Princess en Japón, dijeron los CDC.
De 329 estadounidenses evacuados del crucero, 18 dieron positivo por el virus. Once de ellos están en el Centro Médico de la Universidad de Nebraska, cinco están en instalaciones médicas cerca de la Base de la Fuerza Aérea Travis en California y dos están cerca de la Base de la Fuerza Aérea Lackland en San Antonio, Texas.
