El estado norteamericano de Alabama continúa conmovido por el sufrimiento de cinco hermanitos, que supuestamente eran encerrados por sus abuelos y su madre en jaulas con techo, a las que les ponían candados para que no pudieran salir.
Las autoridades fueron alertadas por los vecinos que escuchaban los gritos de los pequeños.
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El hecho ocurrió en la localidad de Smiths Station, donde vivían los menores de tres, cuatro, diez y once años, junto a su madre, Kylla Michelle Mann y sus abuelos Pamela y James Bond. Un bebé de ocho meses también residía en el lugar, pero en el momento del operativo no estaba presente.
Los gritos se volvieron habituales y se repitieron cada vez que los chicos eran encerrados, como si estuvieran presos, en las pequeñas jaulas.
Todos a la cárcel
Cuando los vecinos advirtieron sobre lo que ocurría, efectivos del condado de Lee llegaron hasta la vivienda y aunque en ese momento los pibes estaban en libertad, hallaron dos jaulas de madera, con techo y listas para ser cerradas con candado. Según pudieron averiguar, los niños fueron puestos en esas celdas en reiteradas oportunidades.
"Los investigadores observaron dos jaulas construidas con madera, que tenían cerrojos. La investigación reveló evidencia de que los niños habían sido encerrados en las jaulas en múltiples ocasiones", afirmó el sheriff Jay Jones. De inmediato, los uniformados detuvieron a los abuelos y a la madre de los chicos, quien tiene 30 años.
Los tres fueron acusados de maltrato infantil, entre otros cargos, y quedaron a disposición de la Justicia. A la madre le fijaron una fianza de 123.000 dólares. Por su parte, los pequeños fueron puestos bajo tutela de los servicios sociales, informó Crónica.