Nueva York, 17 ene (EFE).- La dueña de un edificio, un fontanero y un contratista fueron condenados este viernes en Nueva York a entre 4 y 12 años de cárcel por la explosión ocurrida en un edificio del barrio East Village en 2015 que causó dos muertos y trece heridos.
Maria Hrynenko, de 60 años, el fontanero sin licencia Athanasios Ioannidis, de 59, y el contratista Dilber Kukic, de 44, fueron hallados culpables de homicidio involuntario en un juicio celebrado en la Corte Suprema de Manhattan el pasado noviembre.
El juez determinó que en caso de mostrar buena conducta durante su encarcelamiento los sentenciados podrán salir de prisión a los cuatro años. En caso contrario, permanecerán privados de libertad un máximo de 12 años.
A Hrynenk se le acusó por haber permitido una conexión de gas ilegal en su propiedad que causó la explosión que derrumbó dos edificios, dejó dos muertos y varios heridos.
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Los tres fueron acusados además de agresión y de conducta temeraria.
Las víctimas de la explosión debido a la conexión ilegal de gas, que movilizó a 250 bomberos, fueron Nicholas Figueroa, de 23 años y origen puertorriqueño, y el inmigrante guatemalteco Moisés Ismael Locón, de 26 años.
Los cuerpos de ambos fueron hallados entre los escombros tres días después de la explosión, en un restaurante japonés situado en el primer piso del edificio, y donde se originó la explosión.
Figueroa había acudido a una cita a ese lugar y su acompañante se salvó, mientras que el inmigrante fallecido trabajaba en el lugar.
"Desarrolladores y dueños de edificios deberían tener esta sentencia en sus mentes mientras continúa el auge de la construcción en Nueva York en el 2020", indicó en un comunicado Cyrus Vance, fiscal de Manhattan.
En este mismo caso fue acusados el hijo de Hrynenk, Michael, de 31 años, por su implicación en la conexión ilegal, pero falleció mientas esperaba la celebración del juicio, apuntó el diario The New York Times.