Miami, 5 dic (EFE).- Las autoridades de Florida anunciaron este jueves un concurso que premiará tanto a quienes capturen más pitones birmanas como a los que cacen los ejemplares más grandes, con el fin de contribuir a que esa especie invasora sea erradicada de la mayor reserva natural del sur del estado.
El concurso al que se ha denominado "Python Bowl", por el hecho que Miami será en febrero de 2020 la sede del "Super Bowl", la final del campeonato de liga de fútbol americano, comenzará el 10 de enero, según se anunció este jueves en un acto en el que participó el gobernador de Florida, Ron DeSantis.
"El problema con estas serpientes es que no son nativas de la zona y están diezmando la cadena natural de alimentación", dijo el gobernador, quien tenía en la mano un balón de fútbol americano hecho de piel de pitón.
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El acto se celebró en una de las entradas al parque de los Everglades, un enorme humedal de 1,5 millones de acres (607.500 hectáreas) situado en el corazón del sur de Florida, del que depende el sistema hídrico del sur del estado y del que las pitones birmanas se han adueñado.
Los premios del "Phyton Bowl" son, según la web del concurso, dos cuatrociclos de una marca patrocinadora valorados cada uno en más de 5.000 dólares y dos premios en metálico de 2.000 dólares.
Los vehículos son para el cazador profesional y para el aficionado que más pitones capturen, y el dinero para los que consigan los ejemplares de mayor tamaño, en ambas categorías.
También habrá premios especiales para excombatientes que participen en este desafío.
La Fundación de la Vida Salvaje de Florida entregará los premios en una ceremonia el 25 de enero.
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Nadie sabe a ciencia cierta cuántas pitones birmanas hay en los Everglades, ni cómo fueron a parar allí.
Se manejan diferentes teorías, pero lo importante es el daño que están causando en la fauna autóctona estas serpientes constrictoras que pueden superar los 6 metros (19,6 pies) de largo y los 100 kilos (220 libras) de peso.
Hasta ahora la lucha está en manos de cazadores autorizados, que desde septiembre han aumentado en número a la vez que ha crecido el presupuesto para combatir a la especie invasora.