Nueva York, Estados Unidos | AFP | El presidente Donald Trump dijo el lunes que se reunirá con representantes de la industria del cigarrillo electrónico para encontrar una "solución aceptable" al "dilema" del vapeo, en plena pulseada entre los fabricantes y las autoridades sanitarias de Estados Unidos.
"Me reuniré con representantes de la industria del vapeo, profesionales médicos y funcionarios gubernamentales para encontrar una solución aceptable al dilema del vapeo y el cigarrillo electrónico", escribió el mandatario en Twitter antes de participar en una ceremonia de homenaje a los veteranos de guerra en Nueva York.
"La salud y la seguridad de los niños, junto con los empleos, serán prioridades", agregó.
El cigarrillo electrónico quedó en medio de la controversia desde que vapeadores estadounidenses comenzaron hace unos meses a contraer una rara enfermedad pulmonar. Hasta ahora 2.000 personas se han visto afectadas y 39 han muerto.
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Las autoridades sanitarias han cuestionado el aceite de vitamina E aparentemente agregado a las recargas de cannabis vendidas en el mercado negro.
La industria del vapeo también está acusada de intentar atraer particularmente a los jóvenes, con recargas aromatizadas, y de hacerlos dependientes de la nicotina.
Se espera una decisión esta semana en la Casa Blanca sobre la prohibición de estas recargas -con la excepción de los aromas de tabaco y mentol-, anunciada en septiembre para reducir el vapeo entre los jóvenes.
Donald Trump afirmó el viernes que también quiere aumentar la edad mínima para comprar cigarrillos electrónicos en Estados Unidos de 18 a 21 años.
Juul en la mira
La marca líder de la industria en el país, Juul, había anunciado el día antes el cese de la venta de recargas con aroma a menta, después de la publicación de un estudio que mostraba que era el sabor favorito de los estudiantes de secundaria estadounidenses.
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Los defensores del vapeo han advertido sobre el golpe financiero a la industria si la prohibición se confirma, y la importancia de los cigarrillos electrónicos para disuadir a los exfumadores de recaer.
La prohibición "causaría mucho daño al sector y podría llevar a algunos a la bancarrota", dijo a la AFP Johann Phipps, propietario de una tienda de cigarrillos electrónicos en Texas, quien se manifestó el sábado frente a la Casa Blanca.
"El tabaco y el mentol representan un porcentaje de nuestras ventas, pero alrededor del 85% son los aromas de frutas", agregó.