Un jurado de la ciudad de Nueva York escuchará las declaraciones iniciales y testimonios en el caso de un gurú de autoayuda acusado de trata sexual.
El neoyorquino Keith Raniere enfrenta seis cargos que incluyen tráfico sexual, trabajo forzoso, explotación sexual de un niño, fraude electrónico y violaciones a las leyes federales de extorsión, que habría cometido siendo líder del grupo secreto DOS (acrónimo de Dominious Obsequious Sororium también traducido como Dominio Sobre Sumisas) y en la organización NXIVM o Nexium.
"En una audiencia inicial, tras de ser extraditado de México a Estados Unidos en marzo del 2018, el agente especial del FBI Michael Lever acusó a Raniere de “conspiración intencional para reclutar, atraer, mantener, transportar, proveer, obtener, patrocinar y solicitar una o más personas para comercio sexual interestatal e internacional mediante el uso de la fuerza, amenazas de uso de la fuerza o de causar daños severos a familiares, fraude y chantaje para actos comerciales de sexo”.
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Según testimonios, las mujeres reclutadas eran marcadas con las iniciales de gurú y obligadas a ser sus esclavas sexuales dentro de un esquema piramidal, aunque la defensa alegó de inicio que esas relaciones siempre fueron consensuadas.
A Raniere lo acusaron junto a cinco mujeres que ya se declararon culpables: Nancy Salzman y su hija Laura; la contadora Kathy Russell; la heredera del licor de Seagram, Clare Bronfman; y la amiga de Superman en la serie Smallville, la actriz Allison Mack.
Raniere es el único que ha reclamado su inocencia y se dispone a enfrentar un juicio que dará inicio este martes 7 de mayo.
Al igual que en el juicio del narcotraficante mexicano, Joaquín Guzmán Loera, se espera que el de Raniere sea un proceso muy mediático que acapare la atención de expertos los cuales observaran muy de cerca cómo se procesa a un líder de culto, los cuales no suelen llegar a las cortes debido a que este tipo de organizaciones no son ilegales en Estados Unidos.
En el caso donde se juzgará al neoyorquino Raniere, quien cumplirá 59 años, y quien obligaba a que lo llamaran Vanguard, la relevancia radica en cómo llevaran los fiscales el proceso, que tanto recurrirán a términos como “lavado de cerebro” que a decir de los expertos, puede restarle valor a los cargos o cómo será la forma en que prepararán al jurado para que puedan calificar los procesos de control mental y poder entender que los cultos utilizan la psicología social básica para atraer y retener a los miembros.
El juez estadounidense Nicholas Garaufis, quien se encarga de llevar el caso, ordenó el jueves pasado que el jurado sea anónimo y que esté "parcialmente secuestrado" durante el proceso pese a que no hay un "peligro real" para quienes lo conformen.
Las medidas dictadas tienen el objetivo de evitar la posibilidad de que un periodista o un civil pueda acudir a los miembros antes, durante o después del proceso y que eso pueda viciar el debido proceso. como ya sucedió con el juicio de El Chapo, falta por la cual los abogados del narcotraficante pidieron la reposición del juicio. Sin embargo, cualquier miembro del jurado, si así lo desea, podrá entrevistarse con la prensa al finalizar el caso.
Se espera que el juicio de Raniere dure entre cinco y seis semanas; de ser hallado culpable, podría alcanzar una pena de 15 años en prisión a cadena perpetua.