SAN LUIS (AP) — Un mexicano encarcelado en Kansas acusado de matar a cuatro personas en Kansas y otra en Missouri murió tras haber sido hallado inconsciente en su celda en una prisión de San Luis.
El mexicano Pablo Serrano-Vitorino fue hallado inconsciente solo dentro de su celda el martes a las 2:02 de la madrugada y fue declarado muerto en un hospital una hora después, dijo Koran Addo, portavoz de la alcaldía de San Luis. No se dieron más detalles.
Serrano-Vitorino, de 43 años, quien vivía en el país de manera ilegal, fue acusado de matar a tiros a cuatro hombres en una casa en Kansas City, Kansas, el 7 de marzo del 2016. Fue arrestado un día después a 274 kilómetros (170 millas) de allí, en el condado de Montgomery, en Missouri, donde fue acusado de matar a Randy Nordman, de New Florence. Le presentaron cargos de homicidio premeditado por las cinco muertes.
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Serrano-Vitorino estaba detenido en San Luis a la espera de su juicio en octubre en el caso de Missouri. Fiscales de Missouri estaban pidiendo la pena de muerte.
Las autoridades dicen que la racha asesina comenzó cuando Serrano-Vitorino mató a tiros a su vecino Michael Capps, de 41 años, de Kansas City, Kansas, y otros tres hombres en la casa de Capps – los hermanos Austin Harter, de 29 años, y Clint Harter, de 27, y Jeremy Waters, de 36. Antes de morir, una de las víctimas logró llamar a la policía.
Las autoridades no han revelado el posible móvil.
Serrano-Vitorino luego presuntamente escapó en su camionera tipo pickup a Missouri. Las autoridades dicen que luego mató a Nordman, de 49 años, en una casa en una zona rural cerca de la carretera interestatal 70, ubicada a unos 113 kilómetros (70 millas) al este de San Luis. Fue hallado con un rifle, escondido boca abajo en una zanja a unos kilómetros (millas) de la casa de Nordman, según la patrulla de caminos del estado de Missouri.
Serrano-Vitorino fue deportado a México tras ser hallado culpable de un delito grave en el 2003, pero regresó a Estados Unidos de manera ilegal y fue arrestado en el 2014 y 2015.
En una demanda presentada en Kansas City, el padre de una de las víctimas acusa a funcionarios de inmigración de perder dos oportunidades para arrestar a Serrano-Vitorino.