Washington, 25 feb (PL) Casi 60 exfuncionarios de seguridad nacional condenaron hoy la emergencia declarada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al estimar que la medida carece de cualquier justificación.
Las acciones del mandatario contradicen la abrumadora evidencia en el registro público, incluidos los propios datos y estimaciones de la administración, señala la carta rubricada, entre otros, por los exdirectores de la Agencia Central de Inteligencia John Brennan y de Inteligencia Nacional James Clapper.
A ellos se suman los exsecretarios de Estado Madeleine Albright y John Kerry, de Seguridad Nacional Janet Napolitano y de Defensa Chuck Hagel y Leon Panetta.
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El otrora asesor de seguridad nacional Thomas Donilon, el excomisionado de Aduanas y Protección Fronteriza Gil Kerlikowske, así como los exembajadores Nicholas Burns, Ryan Crocker, Thomas Pickering, Samantha Power y Susan Rice también apoyaron el documento.
Los 58 firmantes aseguran que 'no tienen conocimiento de ninguna emergencia que justifique remotamente' la invocación de poderes anunciados el 15 de febrero por Trump para construir su muro en la frontera con México.
El proyecto del gobernante desató una tormenta política en la Unión, incluso numerosos legisladores republicanos se distanciaron de la Casa Blanca, informo Prensa Latina.
El fondo del debate es si el jefe de Estado tiene potestad para utilizar fondos ya destinados para levantar la obra, una posibilidad rechazada en el Capitolio.
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Los demócratas iniciarán las hostilidades esta semana con una votación y dos audiencias en la Cámara de Representantes contra el proyecto de la Casa Blanca.
Como parte de esa estrategia, la titular de ese órgano legislativo, Nancy Pelosi, anunció que mañana se votará una resolución para detener la medida, que calificó de inconstitucional.
Para el mandatario, el estado de emergencia nacional permite a su Gobierno destinar diversas partidas presupuestarias para financiar la construcción de la valla, aunque numerosos políticos y analistas no están de acuerdo con esa interpretación.
Aunque se da por descontada su aprobación en la Cámara Baja, dada la mayoría que tienen los demócratas en esa instancia, la situación es más compleja en el Senado porque son minoría allí.
Sin embargo, de aprobarse, Trump anunció que vetará la resolución, lo cual sepultaría el proyecto porque los demócratas no tienen los dos tercios necesarios en el Capitolio para imponer su visión.
La declaración de Trump provocó una ola de demandas en los tribunales por parte de diversos sectores de esta nación.
