Dos décadas después del escándalo sexual que sacudió la Casa Blanca y que obligó al entonces presidente Bill Clinton a reconocer que mantuvo una "relación inapropiada" con la becaria Monica Lewinsky, ésta ha roto su silencio por medio de un artículo aparecido este martes en la revista Vanity Fair, en el que asegura estar dispuesta a pedir disculpas a la esposa del exmandatario, Hillary Clinton.
"Si hoy viera a Hillary Clinton en persona, sé que reuniría todas las fuerzas necesarias para decirle, de manera sincera, lo mucho que lo siento", subraya Lewinsky, de 45 años, que recordó que sus primeras palabras de perdón tras el 'affair' —pronunciadas durante una entrevista con Barbara Walters de marzo de 1999— fueron dirigidas a Hillary y a su hija, Chelsea Clinton.
El pasado mes de junio, durante una entrevista concedida a la NBC, Craig Melvin le preguntó a Bill Clinton si pensaba que le debía una disculpa a Lewinsky, a lo que el expresidente contestó con un rotundo "no", alegando que ya se había disculpado de manera pública en 1998.
La que fuera becaria en la sede presidencial en 1995 y 1996 y actual activista contra el 'bullying', asegura en el artículo que, si bien no considera obligatorio que el exmandatario estadounidense se disculpe, cree que debería querer hacerlo. "Él sería un hombre mejor y nosotros, a su vez, una sociedad mejor", añadió.
Lewinsky reconoce que se arrepiente y que se avergüenza de la forma en que se comportó en el pasado. Asimismo, dice sentirse apenada, tanto por haber sido traicionada por un hombre que pensaba que se había preocupado por ella, como por la imagen que la sociedad se creó en torno a su persona, creando "la falsa imagen de que [su] boca era simplemente un receptáculo para el deseo de un hombre poderoso".
La exbecaria de la Casa Blanca admite que se sintió "asustada y dolida" por la forma en que los medios de comunicación se refirieron a ella, cuando, en un primer momento, Clinton negó los hechos, si bien admitió que no deseaba que este tuviera que renunciar, pues no quería "ser responsable de eso".
El artículo firmado por Lewinsky es un adelanto de la serie documental 'El Affair Clinton', de seis capítulos, que se estrenará este domingo en el canal A&E y que aborda, desde un punto de visto femenino, un escándalo sexual que sacudió a la opinión pública mundial en 1998. Lewinsky concluye afirmando que espera que su historia "pueda ayudar a garantizar que lo que [le] sucedió nunca vuelva a ocurrirle a otra persona joven" en Estados Unidos, destacó RT.
Asimismo, en un artículo publicado este martes en New York Post relacionado con la nueva serie documental, Lewinsky revela que Clinton la invitó a un discurso transmitido por radio en la Casa Blanca alegando que "tenía un regalo" para ella."¿Debería verlo a solas? ¿No debería?", confiesa que se preguntó.
El presidente le propuso ir a ver a su secretaria al Despacho Oval, donde, una vez a solas, le mostró un sombrero y un ejemplar del poemario 'Hojas de hierba', de Walt Whitman, algo que Lewinsky calificó de "presente muy significativo".
Según el testimonio de la exbecaria, en determinado momento ellos se dirigieron al baño y mantuvieron relaciones íntimas. Tras el encuentro —que asegura fue el primero—, dijo que nadie le advirtió que su vestido estaba manchado de semen, indicando que ni ella misma se percató de ello, aunque en 1998 declaró ante un jurado que creía que se trataba de "salsa de espinacas".