Autoridades de Nueva York hablan de «acto de terror»

paquetes sospechosos

Nueva York, 24 oct (EFE).- El alcalde neoyorquino, Bill de Blasio, dijo que lo sucedido este miércoles en Nueva York y "en este día doloroso para nuestra nación" es "claramente un acto de terror, que intenta socavar la libertad de nuestros medios de comunicación líderes", por lo que reforzará las medidas de seguridad.

De Blasio, el gobernador del estado, Andrew Cuomo, y el comisionado de la Policía, James O'Neil, ofrecieron una rueda de prensa en Columbus Circle, a pocos metros del edificio Time Warner, sede de la CNN en Nueva York, desalojado desde primera hora de la mañana por un artefacto sospechoso.

Este hecho se produce poco después de conocerse que el Servicio Secreto interceptó entre ayer y hoy potenciales dispositivos explosivos dirigidos a la excandidata presidencial Hillary Clinton y el expresidente Barack Obama, además del multimillonario George Soros. 

Hillary Clinton dice que EEUU vive "tiempos difíciles" tras amenazas de bomba

La excandidata presidencial Hillary Clinton dijo el miércoles que Estados Unidos vive "tiempos difíciles" y llamó a la unidad nacional luego de haber sido una de las prominentes personalidades demócratas que recibieron paquetes sospechosos de contener explosivos.

"Estamos bien, gracias a los hombres y mujeres del Servicio Secreto que interceptaron el paquete dirigido a nosotros mucho antes de que llegara a casa", dijo. 

"Pero estos son momentos difíciles, ¿cierto? Es una época de divisiones profundas y tenemos que hacer lo que podamos para unir a nuestro país", añadió.

La exsecretaria de Estado estaba este miércoles en un evento de recolección de fondos para la candidata demócrata al Congreso Donna Shalala en Miami, Florida.

Poco antes, al norte de Miami, el edificio donde tiene su oficina la congresista demócrata Debbie Wasserman Schultz, en Sunrise, fue evacuado debido a un paquete sospechoso.

La interceptación de estos paquetes se produce cuando Estados Unidos está en plena campaña para las elecciones legislativas de mitad de mandato del 6 de noviembre, consideradas como un referendo para Trump y el gobernante Partido Republicano.